Casi 7 décadas entre el alcalde más joven y el mayor de España, 23 y 90 años

Al alcalde de Cotobade, Jorge Cubela (PP), le queda un mes para cumplir 24 años y seis asignaturas pendientes de la Licenciatura de Derecho, que estudia en los huecos libres que le deja la gestión municipal de un pueblo de poco más de 4.500 habitantes eminentemente rural, limítrofe con Pontevedra.

Siente admiración por Licinio Prieto, independiente por las listas del PP y el regidor más longevo de España. De hecho, piensa que el mérito lo tiene él en realidad: “ser el más joven es menos relevante”.

Licinio alcanzará los 91 años el próximo mayo, de los cuales más de la mitad los ha pasado al frente de la Alcaldía de la localidad abulense de Cuevas del Valle (527 habitantes), aunque mañana se cogerá una baja para tratar de recuperarse de las piernas.

“Estoy fastidiado. Casi no puedo andar”, asegura Prieto en una entrevista con Efe, en la que señala que es la segunda baja que se coge en el último año por motivos de salud, después de que su médico le prohibiese correr, cuenta con ese humor que todavía conserva.

Su puesto lo ocupará temporalmente su primer teniente de alcalde, Emiliano González, aunque Prieto reconoce que pese a estar de baja seguirá ejerciendo “de alguna manera”, ya que cincuenta años en el cargo son demasiados como para que no le sigan consultando sobre “ciertos asuntos del día a día”.

Algo sordo y con algunos problemas de movilidad, aunque “sin dolores”, Licinio Prieto tiene 90 años, pero tomó las riendas del ayuntamiento por vez primera hace 58, cuando apenas superaba la treintena.

Por lo tanto, ha gobernado durante la dictadura este bello municipio situado en la vertiente sur de la provincia de Ávila, en el Barranco de las Cinco Villas, para después hacerlo igualmente en democracia, tras resultar elegido mayoritaria y democráticamente por sus vecinos.

La última vez, el 22 de mayo de 2011, durante los comicios municipales que le sirvieron para revalidar la mayoría absoluta, aunque con algo menos de apoyo que cuatro años antes, logrando con el PP 4 concejales, frente a los 5 que tenía, mientras que el PSOE pasó de 2 a 3.

Cubela es el regidor más joven de España desde que en 2011 ganase las elecciones municipales con el PP por mayoría absoluta, desbancando al PSOE y tras una campaña de las de ir “puerta por puerta”.

“El debate de la edad se terminó la noche de las elecciones”, dice, no obstante, orgulloso sobre su condición, que sigue produciendo algún malentendido de vez en cuando entre quienes no lo conocen, como cuando algunos proveedores se lo cruzaron por el pasillo del consistorio y le preguntaron “por el alcalde”.

Los hizo pasar al despacho y ahí repararon: “Ah, ¿eres tú?”. De momento, sigue pidiendo a los interlocutores que lo tuteen.

“Alguna vez ha habido algún caso de sorpresa”, bromea el joven regidor, al que la vocación le llegó a través del padre, que fue teniente de alcalde del pueblo durante 16 años. De los cuatro hermanos, fue el único que se decantó por la militancia política, que estrenó con el ingreso en Nuevas Generaciones a los 16, tras hacer sus primeros pinitos como delegado de clase en el instituto.

Prieto ha visto la transformación de Cuevas del Valle. Cuando tomó posesión “no había ni un duro, el edificio del ayuntamiento estaba en ruinas, no había teléfono... y ahora es moderno”. En este sentido, presume de una localidad “con 10 kilómetros de tuberías de agua, con una joya de piscina municipal y con alumbrado público”, además de hacer hincapié en que, pese a la crisis, “Cuevas tiene poco paro”.

Durante su medio siglo como alcalde, con algunos periodos en los que no ejerció, Licinio Prieto no ha estado afiliado ni al PP, ni a UCD ni al CDS, formaciones por las que ha concurrido a las urnas y con las que ha gobernado su pueblo.

Dice Licinio tener la conciencia tranquila, porque en este tiempo ha luchado “por el bienestar” de unos vecinos que lo siguen reeligiendo, al mismo tiempo que expresa su “satisfacción” por no haber cobrado “nunca”, ni sueldo ni dietas: “no quiero que diga nadie que me llevo nada, tengo menos patrimonio que cuando llegué a la Alcaldía, de ahí que me pueda ir con la cabeza bien alta”.

Cubela se ha sumado al mantra de que lo primero es reducir el gasto público. Se rebajó un 20 % el sueldo -cobra 35.000 euros brutos- y eliminó las dedicaciones exclusivas del resto de concejales, bajó un tercio el gasto corriente y los pagos por asistencia a los plenos, y defiende que en las contrataciones municipales se trate de primar a las empresas de la zona, para incentivar la economía local.

“Desde que llegué, mi obsesión ha sido dar trabajo a la gente”, remarca también Prieto, que tampoco está satisfecho con la pérdida de población, ya que Cuevas del Valle tiene ahora poco más de 500 habitantes, frente a los más de 1.100 que tenía hace 50 años.

Parte de esa emigración la vive en carne propia, ya que su mujer y él han visto como sus tres hijos se han ido a Madrid, donde viven sus seis nietos y tres bisnietos.

Licinio critica con dureza los casos de corrupción, como Cubela, que explica desde su juventud que “esto no es cosa de ahora”. Así, cita los casos Naseiro, Filesa, Roldán y, en este momento, critica la financiación ilegal de Unió Democrática de Catalunya o las revelaciones sobre la familia de Jordi Pujol.

Entiende que estas prácticas afectan a las cúpulas de los partidos y conviene en que hay que “perseguirlas” respetando la presunción de inocencia. “En política no se puede entrar a ganar dinero”, apostilla, quien cuenta que en su experiencia personal “eso de los sobres”, por el caso Bárcenas, “nunca” lo ha visto.

Desconoce Cubela qué le deparará el futuro, y también Licinio, que afirma que para 2015 falta mucho, pero con una advertencia: “Siempre he dicho que no volvía y luego me he presentado. No cumplo con la palabra dada”, un comentario aderezado con un humor cáustico.

Víctor Honorato y Antonio García.