El partido de dirigente esrilanqués destituido impugnará la disolución del Parlamento

El partido del ex primer ministro de Sri Lanka Ranil Wickremasinghe, cuya destitución disparó la crisis de la nación que llegó a la disolución del Parlamento, anunció hoy que impugnará la decisión del presidente, Maithripala Sirisena, contra la Cámara.

“Iremos a los tribunales en contra de esta decisión, demostraremos que tenemos mayoría en el Parlamento la próxima semana, mostraremos que el Presidente del dictador ha disuelto un gobierno que tiene una mayoría en el Parlamento”, dijo a periodistas el portavoz del Partido de Unidad Nacional (UNP), Mangala Samaraweera.

El portavoz del UNP, la formación de Wickremasinghe, aseguró, sin embargo, que están dispuestos a ir a las urnas a participar en la convocaría a elecciones que anunció ayer Sirisena tras disolver el Parlamento.

“No estamos en contra de las elecciones, y estamos listos si se celebran en un momento dado, sin embargo, estamos en contra de la manera inconstitucional del llamado a las elecciones”, dijo el vicepresidente del partido tras una reunión de los líderes de la formación.

“Lucharemos contra esto en la Corte, en el Parlamento y durante las elecciones”, añadió.

La decisión tomada ayer por el presidente de Sri Lanka va en contra de la Constitución, tras la enmienda “que recortó los poderes que tenía el jefe de Estado, incluido el poder para disolverlo”, explicó.

Según esta reforma, dijo, el presidente puede disolver el Parlamento solo después de cuatro años y medio de haberse constituido, por lo que, la posibilidad de celebrar elecciones es solo en febrero de 2020.

“No tenemos miedo de los caprichos y fantasías maníacas de Maithripala Sirisena, estamos en el lado correcto de la democracia”, dijo Samaraweera, exministro del Gobierno que también fue destituido junto a Wickremasinghe.

La decisión del mandatario contra el órgano legislador se produjo horas después de que su Gobierno admitiese que contaba solo con 105 de los 225 miembros del Parlamento para respaldar la destitución de Wickremesingh, y el nombramiento, en su lugar, del expresidente Mahinda Rajapaksa, en una votación que se celebraría la próxima semana.

Por su parte, el UNP tenía casi un centenar de apoyos, lo que había dejado en los partidos minoritarios e independientes el voto crucial para destrabar la crisis del país.