El PP tacha a Sánchez de mentiroso y el PSOE le recuerda las armas de Irak

Madrid, 15 jul (EFE).- El PP ha asegurado en el Senado que lo que más define al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es la “mentira”, acusación contestada por varios grupos, como el PSOE, que le ha recordado cómo José María Aznar se escudó en las inexistentes armas químicas de Irak para llevar a España a una guerra.

El grupo popular ha rescatado este miércoles en el pleno de la Cámara Alta el llamado Delcygate, la rocambolesca reunión que en enero mantuvo el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, en el aeropuerto de Barajas.

A partir de este episodio el PP ha defendido una moción con la cual pretendía que el Senado instara al Ejecutivo a “evitar que la mentira sea el principio que sostenga las políticas de Estado y muy especialmente la política exterior”.

Solo ha conseguido el respaldo expreso de Vox a su iniciativa, desestimada por el resto del hemiciclo, pero su debate ha derivado en un choque entre el senador del PP David Erguido y los portavoces de los grupos nacionalistas y de izquierda, que se han reprochado mutuamente emplear las falacias para hacer política.

Erguido ha hablado de la “postmentira” que según él practican el PSOE y Unidas Podemos desde un Gobierno con un comunista dentro, en referencia a Alberto Garzón, lo que le ha llevado a afirmar que “no hay nada más comunista que el uso institucional de la mentira”.

Y después de lamentar que los socialistas alimenten “el nacionalismo radical” con sus mentiras les ha espetado: “Si hay una palabra que está definiendo a este presidente y a este Gobierno es mentira y mentirosos; es constante”.

La senadora del PSOE Estefanía Marín Palop ha dicho que el PP ha tomado la “senda peligrosa” del “desvarío y la alucinación” y ha recordado que cuando gobernaba “no dudó utilizar la mentira para una guerra”, que también empleó cuando atribuyó falsamente los atentados del 11-M a la banda terrorista ETA.

También Koldo Martínez, de la Izquierda Confederal, ha traído a colación las armas de destrucción masiva de Irak y ha negado cualquier credibilidad del PP al hablar de mentiras: “Conociéndoles como les conocemos, no les creemos”.

El PNV, por boca de Luis Uribe, les ha acusado también de caer en la “exageración y el tremendismo” y Bernat Picornell, de ERC, les ha afeado su “viaje definitivo” hacia la “extrema derecha”, al “usar la falacia para intentar tener la razón”.

Lo ha hecho después de que el portavoz de Vox, José Manuel Marín Gascón, lograra que el PP aceptara una enmienda suya que también instaba al Ejecutivo a “abandonar” la difusión de bulos.

Este senador ha coincidido con Erguido en repasar las promesas de Sánchez de no pactar con Bildu o sus declaraciones en las que aseguró que no dormiría tranquilo con Iglesias en el Gobierno.

En el tramo final del debate, el senador del PP ha intervenido de nuevo para reafirmar que tiene la “utopía” de que la izquierda “deje de mentir”.

Pero ha recibido nuevos reproches del PSOE, en este caso del senador Rafael Lemus, quien ha acusado al líder de su partido, Pablo Casado, de usar el Senado como “la zona outlet de la política” donde presenta mociones que “no se atreve a llevar al Congreso”.

La votación telemática de esta iniciativa, sin posibilidad alguna de prosperar a tenor de la posición de los grupos, se ha iniciado al término de la sesión plenaria y se proclamará en el siguiente pleno, ya en septiembre, dado que la de hoy era la última sesión plenaria previa al verano, con carácter extraordinario.