Un estudio de la Concapa defiende conceder becas por esfuerzo de los alumnos

La Confederación Nacional de Padres Católicos de Alumnos (Concapa) ha publicado hoy un estudio sobre la educación y la familia, en el que la mayoría de los encuestados está a favor de que las administraciones concedan las becas a los alumnos en función de su renta pero también de su esfuerzo.

El “barómetro” de la Concapa otorga 9,1 puntos sobre 10 a la situación económica familiar y al esfuerzo del estudiante como los principales aspectos a la hora de distribuir las becas de estudios.

Además, los encuestados dan 7,8 puntos la inteligencia de los alumnos a la hora de que se distribuyan estas ayudas.

La encuesta se ha realizado el pasado octubre a través de 405 entrevistas telefónicas a mayores de edad y se ha preguntado sobre el tiempo de visionado de televisión por los menores, la percepción del nivel educativo de los alumnos por parte de los padres, las distintas vías de ayuda al estudio o, la valoración del precio de los libros de texto y su sustitución por tabletas.

El 86,6 % de las personas entrevistadas también ha defendido que las administraciones y bancos deben realizar préstamos económicos personales a los estudiantes de estudios no gratuitos como son los universitarios o la Formación Profesional.

Ayudas que deberán devolver los beneficiarios una vez hayan finalizados sus estudios y cuando estén trabajando, según sus ingresos.

Los entrevistados han valorado la educación española con 6,2 puntos en una escala de 0 a 10, aunque la mayoría entiende que debe mejorarse mucho o bastante.

El 70,3 % afirma que los alumnos solo leen “algo” en el colegio y algo más de dos de cada diez (21,6 %) consideran que leen bastante.

Casi nueve de cada diez considera que los alumnos de educación no universitaria debería disponer en sus centros educativos de los libros de texto y demás materiales necesarios para sus estudios de manera gratuita, pues el 93,4 % de los encuestados opina que los libros de texto son caros y más de la mitad pide que sean gratis.

Además, el 62,2 % cree que algunos libros tendrían que sustituirse por tabletas u ordenadores, aunque el grupo de jóvenes entre 18 y 35 años es el que menos está de acuerdo en dicho cambio.

Por otra parte, casi nueve de cada diez entrevistados considera que las administraciones deben establecer mecanismos para quejas en relación con los programas de televisión para menores.

El 93 % cambia de canal cuando ven programas que consideran inadecuados para menores y la mayoría opina que este tipo de programas deben finalizar entre las 20-21 horas.