El expresidente luso Mário Soares sigue inconsciente pero reacciona a estímulos

El expresidente portugués Mário Soares, ingresado desde este martes en cuidados intensivos de un hospital de Lisboa, continúa inconsciente aunque se observa una “discreta mejoría” porque reacciona a estímulos.

Según el último parte médico, divulgado a periodistas por un portavoz del Hospital de la Cruz Roja de la capital lusa, Soares no muestra una “significativa alteración de las señales vitales”, pero sí “una discreta mejoría del estado de consciencia”.

“Esto significa que está inconsciente aunque reacciona a estímulos”, precisó el portavoz.

Esta es la única circunstancia que ha cambiado con respecto a ayer, agregó el portavoz del centro médico, donde el expresidente, de 92 años, continúa bajo “permanente vigilancia” del equipo sanitario, que prevé dar un nuevo parte médico esta tarde.

Mário Soares, presidente de Portugal entre 1986 y 1996, fue ingresado durante la madrugada de este martes en el Hospital de la Cruz Roja en situación “crítica” y “con pronóstico reservado”, según los últimos partes médicos.

Este martes recibió la visita en el centro médico del actual presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y estuvo acompañado por varios familiares, entre ellos su hijo el exministro de Cultura João Soares.

El expresidente luso, también fundador del Partido Socialista (PS), se ha mantenido activo pese a lo avanzado de su edad y en los últimos años ha continuado trabajando en la Fundación que lleva su nombre, además de publicar libros y artículos sobre la situación de Portugal.

Mário Soares está considerado como una de las figuras políticas portuguesas más importantes de los últimos 40 años por su participación decisiva en la transición a la democracia cuando la Revolución de los Claveles de 1974 puso fin a la dictadura portuguesa (1926-1974).

Antiguo líder del PS, Soares fue además primer ministro de Portugal en dos fases (1976-1978 y 1983-85) y presidente portugués en un periodo en el que se produjo la entrada del país en la Unión Europea.

Desde la muerte de su esposa Maria Barroso en julio de 2015, sus apariciones en público disminuyeron y dejó de escribir una columna que mantenía en un diario portugués.

Su última aparición pública fue precisamente en un homenaje a Barroso celebrado el pasado 28 de septiembre.