El jefe de la facción árabe del Parlamento acusa a Netanyahu de “incitación”

El diputado Ayman Odeh, que encabeza la Lista Común, agrupación de partidos árabes en el Parlamento de Israel, denunció hoy que el Gobierno de Benjamín Netanyahu “incita” contra los árabes israelíes, tras sancionar la Cámara ayer a tres diputados de esa comunidad.

“Netanyahu ve a la minoría árabe (un 20 % de la población israelí) como una amenaza” y como un grupo “muy problemático”, declaró el diputado en una conferencia hoy en Jerusalén ante periodistas internacionales.

El Gobierno, aseguró, está siguiendo “un claro camino” para dañar a esta población y a sus representantes.

Una de las últimas manifestaciones de ello sería la decisión ayer de la comisión de Ética de la Kneset (Parlamento) de sancionar a tres diputados árabes con dos y cuatro meses sin participar en debates parlamentarios por reunirse con familiares de palestinos abatidos por fuerzas de seguridad cuando trataban de perpetrar ataques contra israelíes.

Odeh explicó que los diputados en cuestión -Hanín Zoavi, Basel Gata y Yamal Zajalka- visitaron a las familias como mediadores entre estas y las autoridades israelíes para que les entreguen los cadáveres y puedan ser enterrados.

El silencio que estos guardaron en esa reunión fue, señaló, “durante la lectura de la fatiha” (primer verso del Corán), que “se recita siempre que ha muerto alguien, dura treinta segundos y no supone defender ni apoyar el motivo de la muerte”.

“Trabajar para la liberación de los cadáveres es una cuestión moral y humana”, declaró.

Tras conocerse la visita, Netanyahu prometió que los tres legisladores serían sancionados y señaló: “No estamos dispuestos a aceptar que diputados israelíes apoyen a las familias de los asesinos de ciudadanos israelíes y guarden un minuto de silencio en memoria de quienes han asesinado a niños israelíes. Todo tiene un límite. Hay una cosa que se llama 'honor nacional'”.

La coalición parlamentaria que respalda al primer ministro reaccionó también aprobando ayer un proyecto de ley para que el Parlamento pueda apartar a un diputado de sus funciones y suspenderlo de sueldo con una mayoría de 90 de los 120 votos de la Cámara.

“No hay duda de que estamos viendo un aumento de la incitación y deslegitimación de la población árabe en Israel (en los últimos meses). El propio primer ministro es quien está al frente de la incitación”, denunció Odeh, quien recordó que Netanyahu declaró en sede parlamentaria que los diputados árabes “llevan la bandera del ISIS”, el grupo yihadista Estado Islámico.