El gobernador de Sao Paulo recibió dinero irregular de Odebrecht, según un diario

El gobernador de Sao Paulo, Gerlado Alckmin, recibió dinero de forma irregular para financiar sus campañas electorales, según una confesión realizada por ejecutivos de la constructora Odebrecht y filtrada hoy por el diario Folha de Sao Paulo.

Alckmin, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), recibió presuntamente dos millones de reales (unos 588.000 dólares) de Odebrecht para costear las campañas electorales de 2010 y 2014, explicaron ejecutivos de la empresa en una “delación premiada”.

El gobernador es uno de los hombres fuertes del centroderechista PSDB, aliado del presidente conservador Michel Temer, y su nombre suena con fuerza como posible candidato de cara a las elecciones presidenciales de 2018.

De acuerdo con Folha de Sao Paulo, el hermano de la esposa de Alckmin sirvió de intermediario a la hora de recibir el dinero por parte de la compañía.

La posición de Alckmin se fortaleció el pasado mes de octubre, después del triunfo arrollador del empresario Joao Doria en la primera vuelta de las elecciones municipales de Sao Paulo, la ciudad más poblada y rica del país.

La figura de Alckmin se ha visto ahora salpicada por la confesión de Odebrecht, la cual se enmarca dentro un acuerdo de “delación premiada” firmada por exaltos cargos de la compañía a cambio de una reducción de sus condenas.

La constructora Odebrecht no se ha pronunciado todavía sobre la supuesta implicación de Alckmin.

La delación, publicada a cuentagotas, ha sido calificada por los medios de comunicación brasileños como la “confesión del fin del mundo”, ya que se sospecha que el relato de altos ejecutivos de la compañía y del propio expresidente Marcelo Odebrecht podría alcanzar al primer escalón de la política brasileña.

Según comprobó la Fiscalía, Odebrecht y otras constructoras importantes del país obtenían contratos amañados con Petrobras, inflaban los valores y repartían las diferencias entre directores de la petrolera estatal y partidos políticos que amparaban las corruptelas.

La compañía ha pedido públicamente disculpas y ha firmado un acuerdo de lenidad con las autoridades locales por el cual se compromete a pagar cerca 6.800 millones de reales (unos 2.000 millones de dólares) de multa por su participación en la trama.