Iceta promete diálogo al independentismo si acepta “las reglas del juego”

El líder del PSC, Miquel Iceta, ha prometido diálogo a los independentistas si aceptan “las reglas del juego” antes de sentarse a la mesa: “Estamos dispuestos a escuchar, estamos dispuestos a dialogar y estamos dispuestos a ceder”, ha dicho en el arranque de campaña de los socialistas catalanes.

El líder del partido ha asumido el protagonismo del arranque de campaña del PSC, dada la ausencia de la cabeza de lista por Barcelona al Congreso y presidenta de la cámara Baja, Meritxell Batet, que guarda reposo por prescripción médica y prevé incorporarse a los actos públicos en la medida que su salud lo permita.

Iceta ha argumentado la condición que pone a los independentistas para negociar -que respeten el marco legal- del siguiente modo: “¿Jugarías tú al parchís con alguien que no aceptara las reglas del juego? Hay gente buena que seguramente sí, pero yo no. ¿Jugarías al ajedrez con alguien que decide que porque le conviene el alfil se moverá como el caballo?”.

En su intervención, Iceta ha reivindicado que el PSC es el único partido que puede derrotar “a la derecha y al independentismo” si vence el próximo 10 de noviembre.

En esta repetición electoral, los socialistas aspiran a disputar la primera plaza a ERC, que en abril les sacó 57.000 votos en Cataluña, aunque las últimas encuestas muestran cierto estancamiento tras el crecimiento experimentado el 28A, cuando Batet se resarció de los peores resultados del partido -los siete escaños que obtuvo en 2016- y volvió a los dos dígitos con doce escaños.

Ante la evidencia de que el conflicto catalán centrará gran parte del debate que precederá a las elecciones del 10 de noviembre, ha augurado que el PSC recibirá dardos constantes: el independentismo y los comunes le recriminarán que no dialogue, y la derecha pedirá más mano dura.

También ha apelado al diálogo el número uno del PSC al Senado por Barcelona y presidente de la cámara Alta, Manuel Cruz, que ha arrancado con una declaración de intenciones sobre cuál va a ser su papel en esta campaña: “No está entre mis propósitos despertar grandes pasiones ni emociones desbordantes”, ha dicho.

Y es que, para el filósofo, la política actual va sobrada de emotividad y hace falta atemperar los ánimos para abordar una cuestión tan compleja como la diversidad territorial de España.

En este sentido, ha lanzado un mensaje a Torra: “Para el diálogo hacen falta dos y ahora solo hay uno dispuesto, que somos nosotros. Por eso al señor Torra hay que decirle que dialogar no es condescender a sus exigencias”.