“Justicia”, la consigna para el policía víctima de una turba en Bolivia

“¡Justicia!” fue la consigna más escuchada este martes en el velatorio de Juan José Alcón, un policía fallecido en Bolivia tras la agresión sufrida durante el asalto a una comisaría la semana pasada en El Alto, ciudad donde las protestas tras la dimisión de Evo Morales son especialmente violentas.

Alcón, sargento de policía, permanecía ingresado desde el pasado 11 de noviembre en el Hospital Obrero de La Paz, después de haber sido golpeado y apedreado por una turba que quemó y saqueó las instalaciones del Comando Regional de la Policía de El Alto, ciudad aledaña, de acuerdo a la versión oficial.

El uniformado falleció en la tarde del lunes debido a las múltiples fracturas y lesiones que sufrió durante la toma de la comisaría.

“Hermano, cuando estés al lado de nuestro creador, te rogamos que ores por la paz de nuestra querida Bolivia”, pidió el nuevo jefe policial, Rodolfo Montero, durante la ceremonia.

Alcón fue honrado en esta jornada por compañeros, familiares y vecinos en una de las comisarías de El Alto, la segunda ciudad más poblada de Bolivia, con casi un millón de habitantes, en una ceremonia a la que asistió el comandante nacional de la Policía Boliviana, el coronel Rodolfo Montero.

Montero fue designado nuevo comandante de la Policía el jueves pasado, tras el relevo de Yuri Calderón por el Gobierno interino de Bolivia.

Centenares de policías acudieron a homenajear a su compañero al velatorio, según comentó a Efe el comandante regional de la Policía en El Alto, Iván Rojas.

Centenares de personas, entre vecinos y uniformados, reclamaron “justicia” para una de las últimas víctimas que se han cobrado las protestas en el país.

“Pedimos al señor comandante, aquí presente, que esto no se quede en nada y se siga una investigación profunda para dar con aquellos autores que han dañado a nuestro hermano”, pidió durante la ceremonia Wilson Mamani, sargento de Policía en El Alto.

Los militares y policías realizan operaciones conjuntas desde el 11 de noviembre para frenar la violencia en el país, donde desde los comicios del 20 de octubre han muerto al menos 27 personas y más de 700 han resultado heridas, según datos oficiales.

En El Alto, una de las ciudades donde históricamente Evo Morales siempre recibió más apoyos, las protestas se han recrudecido desde que el líder indígena renunciara a la Presidencia el pasado 10 de noviembre forzado por las Fuerzas Armadas.

Al menos tres personas murieron por heridas de arma de fuego y otras treinta resultaron heridas este martes en El Alto, cuando seguidores de Morales protestaban contra el Gobierno interino de Jeanine Áñez frente a militares y policías que custodiaban una refinería.