La justicia francesa rechaza excarcelar al etarra “Súsper” por su enfermedad

El Tribunal de Apelación de París rechazó hoy la demanda del exdirigente etarra Ibón Fernández Iradi, “Súsper”, para ser excarcelado por la esclerosis múltiple que padece desde hace años, explicó a Efe la abogada Maritxu Paulus Basurco.

La sala de aplicación de penas del tribunal estimó que la enfermedad de Fernández Iradi, de 43 años, no es por ahora invalidante y no se puede conocer cuál será la evolución, es decir, que no se sabe si habrá un agravamiento que haga que su estado sea incompatible con su permanencia entre rejas.

Paulus Basurco dijo que no puede asegurar por el momento si recurrirán este dictamen ante el Tribunal Supremo, porque primero van a examinarlo en profundidad y estudiar los instrumentos de que dispondrían para sacar adelante ese procedimiento.

En cualquier caso, siempre quedará la posibilidad de lanzar una nueva demanda de suspender la pena de prisión si se argumenta que se ha producido un empeoramiento en la esclerosis con consecuencias para su vida como interno.

La letrada subrayó que con el rechazo de la excarcelación “el problema que se plantea es la ausencia de atención” que recibe en prisión el que fuera “jefe militar” de la organización terrorista, que ha sido condenado en tres ocasiones en Francia: dos a 30 años -una de ellas por dejar malherido a un gendarme en 2001- y la tercera a 15 años.

Además de los medicamentos, recibe una sesión de fisioterapia cada tres semanas cuando -según la abogada- lo que necesitaría son varias sesiones por semana.

“Está extremadamente delgado, muy debilitado” y “sus actividades están muy limitadas” por la esclerosis, aunque puede andar por sí mismo, contó la abogada.

En un último informe médico encargado por la justicia y dado a conocer el pasado mes de marzo, los facultativos concluyeron que el estado de “Súsper” era “compatible con su detención”, aunque reconocían que en el penal de Lannemezan donde está internado no podía recibir todos los tratamientos.

Fernández Iradi (San Sebastián, 1972) fue arrestado una primera vez en diciembre de 2002 en Tarbes (sur de Francia), pero antes de ser presentado ante el juez logró escaparse de la comisaría de Bayona.

Volvió a ser detenido en diciembre de 2003 en Mont de Marsan (suroeste de Francia) con abundante documentación de la banda, tanto operativa como contable. La justicia francesa accedió en 2013 a su entrega temporal a España para ser juzgado.