Manifestaciones de distinto signos recorren Barcelona sin incidentes

Barcelona, 12 oct (EFE).- Diversas manifestaciones de distinto signo político han recorrido en la mañana de este lunes, día de la Fiesta Nacional, las calles de Barcelona sin que se produjeran incidentes graves, si bien un acto de la ultraderecha ha acabado con la que quema de las fotos de los expresidentes catalanes Lluis Companys, Quim Torra y Carles Puigdemont.

Una manifestación convocada por la plataforma independentista autodenominada Som antifascistes ha congregado a unas 300 personas, según la Guardia Urbana, que han partido desde la plaza de Lesseps hasta la sede de Vox, en las inmediaciones de la ronda del General Mitre, que permanecía custodiada por los Mossos, para regresar luego al barrio de Gracia.

Durante el recorrido, en el que se no se han registrado incidentes, los manifestantes han exhibido una pancarta en la que se leía “L'antifeixisme es cosa de totes” y han lanzado consignas como “Barcelona será la tumba del fascismo”.

Efectivos de los Mossos han realizado durante la marcha diversas identificaciones de manifestantes pero no han practicado ninguna detención.

Mientras esta manifestación discurría por la parte alta de la ciudad, en las inmediaciones del monumento a Colón se han concentrado centenares de personas para participar en un acto convocado por el ultraderechista Frente Nacional Identitario Partido Nacional Socialista Obrero Español (FNI PNSOE).

En ese acto, alguno de los concentrados portaba banderas con signos fascistas y de Falangue Española, y varios de ellos, brazo en alto, han cantado el “Cara el sol” y han quemado banderas esteladas independendistas y las fotos de los expresidentes catalanes Companys, Torra y Puigdemont.

Fuentes de Vox, que previamente había celebrado en el mismo lugar un acto político con motivo de la Fiesta Nacional, han precisado a EFE que ningún dirigente de la formación se encontraba en la zona cuando se han quemado banderas y fotos y han desvinculado al partido de esos hechos.

En paralelo, una marcha lenta de coches, convocada también por formaciones de ultraderecha, ha partido de la plaza de Artós de Barcelona para llegar hasta el monumento a Colón, en el puerto de la ciudad.

Unos 180 vehículos, entre coches y motos, según la Guardia Urbana, han participado en esa marcha, que ha obligado a cortar el tráfico a su paso por las principales calles de la ciudad hasta llegar al monumento, donde ha sido recibida con aplausos por los concentrados de los actos políticos previos que se habían celebrado ante el monumento a Colón.

Por su parte, algunos ayuntamientos catalanes, como los de Corbera y Cardedeu, han abierto hoy sus puertas y han trabajado con la presencia de los funcionarios que han acudido a pesar de la festividad, según ha informado la CUP. En ningún caso se han registrado incidentes.