Las negociaciones de paz para Yemen se reanudan el día 15 en Suiza

El enviado especial de la ONU para el Yemen, Ismail Ould Cheikh Ahmed, anunció hoy que las negociaciones de paz para ese país se reanudarán el próximo día 15 en Suiza, fecha en la que también se prevé el inicio de un alto al fuego.

“Tenemos señales sólidas de que tendremos un cese de las hostilidades y me refiero a mis entrevistas con el presidente (Abdo Rabu Mansur) Hadi y con las otras dos partes... todos parecen estar de acuerdo con la idea”, dijo a la prensa.

Ould Cheikh Ahmed consideró que esa medida es necesaria con vistas a crear una “atmósfera favorable para estas negociaciones”, que durarán todo el tiempo que se requiera para llegar a un resultado.

Según el mediador, el alto al fuego no estará condicionado a la duración de las conversaciones ya que “no será una pausa (en los enfrentamientos)”.

“Estamos pidiendo a las partes que se adhieran a un alto al fuego sin límite de tiempo, que sea de largo plazo y duradero, aunque somos realistas y sabemos que cuando nos encontremos el día 15 todavía habrá muchos detalles por aclarar”, comentó en una breve comparecencia.

“Un alto al fuego permanente requiere más preparación y un mecanismo de vigilancia”, agregó.

El Gobierno suizo está buscando un lugar distinto a Ginebra -ciudad que habitualmente alberga negociaciones de paz- para estas reuniones con el fin de que, alejadas lo más posible de los periodistas, puedan desarrollarse sin presiones.

En breve se informará dónde exactamente tendrán lugar las negociaciones, que Ould Cheikh Ahmed ha conseguido convocar después de intensas consultas de varias semanas en distintos países del mundo árabe.

En ellas se entrevistó con representantes de las partes yemeníes beligerantes, así como con otros países involucrados, en particular aquellos que participan en una coalición que apoya a Hadi y que desde el pasado marzo bombardea las posiciones de los rebeldes hutíes.

Ould Cheikh Ahmed aseguró que nadie ha puesto “precondiciones” para participar en este proceso diplomático, que -enfatizó- se enmarcará en una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que reclama la retirada de las milicias rebeldes de las ciudades y que éstas depongan las armas.

Las delegaciones de los dos bandos en conflicto estarán compuestas por doce personas cada una, de las que ocho serán negociadores y cuatro asesores.

La delegación del Gobierno de Hadi estará encabezada por su viceministro de Asuntos Exteriores, mientras que del otro lado de la mesa habrá dirigentes de los hutíes, así como del partido Congreso General del Pueblo del expresidente Ali Abdullah Saleh.

El mediador dijo que el reinicio del diálogo es producto de un esfuerzo de varios meses, aunque reconoció que el reciente asesinato del gobernador de la ciudad de Adén, Yafar Mohamed Saad, ha dejado claro el riesgo de una degradación mayor de la situación.

Ese crimen fue reivindicado por los terroristas del Estado Islámico (EI), que ha irrumpido así en el conflicto del Yemen.

Ese asesinato “ilustra los peligros que el Yemen afrontará si no vamos rápido a la mesa de negociaciones”, advirtió el enviado de Naciones Unidas.

Adelantó que los temas prioritarios en la agenda negociadora tienen que ver con medidas de confianza mutua, que además de la implementación del alto al fuego debería incluir la liberación de prisioneros y el acceso de la ayuda humanitaria para la población.

“Todo ello sería positivo para rebajar las tensiones y allanar el camino para un arreglo pacífico al conflicto en el Yemen”, comentó Ould Cheikh Ahmed.

Otros puntos centrales serán definir el mecanismo para la retirada de las milicias y grupos armados de varias partes del país, así como la gestión de las armas, en particular de la artillería pesada y mediana.

En este aspecto, dijo que se considera esencial evitar cualquier vacío de poder que pueda permitir que grupos terroristas se apoderen de ese armamento, como ha ocurrido en otros conflictos, entre ellos los de Irak y Siria.