El alto representante del Mercosur niega que el cambio de Gobiernos cause retroceso social

El alto representante del Mercosur, Florisvaldo Fier, descartó hoy en una entrevista con Efe en Asunción que los cambios en los Gobiernos de los países del bloque regional conlleven retrocesos en las políticas sociales a nivel regional.

Fier participó este miércoles en Asunción de un seminario sobre “Democracia y Políticas Públicas”, organizado por el Instituto Social del Mercosur y el Ministerio de Desarrollo Social de Uruguay, país que ostenta la presidencia temporal del bloque.

El representante del Mercosur destacó que las políticas sociales del bloque se han construido en los últimos 10 años, pero no solo con base en la voluntad de los Gobiernos, sino impulsadas por la sociedad civil organizada.

Por ello, confió en que los movimientos sociales y las organizaciones no gubernamentales defiendan las medidas sociales y “resistan para que los Estados no reculen”.

Destacó además que los cambios de Gobierno no tienen por qué afectar a las políticas públicas del bloque, ya que estas se inscriben en compromisos regionales ya firmados, como el Estatuto de la Ciudadanía, o el Plan Estratégico de Acción Social (PEAS).

Ambos planes, según Fier, cuentan con cronogramas para su cumplimiento, y en su mayoría dependen más de las acciones políticas que de los presupuestos, por lo que pueden seguir avanzando incluso en contextos de crisis económica.

Por ello, a pesar de que varios Gobiernos del Mercosur estén adoptando políticas “del sistema económico neoliberal, que busca un Estado mínimo con poca inversión social”, Fier aseguró que “ningún presidente del bloque está en contra de construir la ciudadanía de Mercosur”.

El último cambio de Gobierno del Mercosur se originó el pasado 12 de mayo, cuando la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, fue suspendida de su cargo durante seis meses, mientras se organiza un juicio político para su destitución por un presunto maquillaje en las cuentas públicas.

Su vicepresidente, Michel Temer, asumió el Gobierno del país durante la suspensión, y entre sus primeras medidas anunció una reforma del régimen de jubilaciones y una revisión de los programas sociales.

El Partido de los Trabajadores (PT), al que pertenecen Rousseff y su antecesor en el cargo, Luiz Inácio Lula da Silva, acusó a Temer de querer desmantelar los programas sociales establecidos en anteriores Gobiernos.