Rusia ve ilegales los ataques al Estado Islámico en Siria y exige que se coopere con Damasco

El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, aseguró hoy que los ataques llevados a cabo por EEUU y otros países contra bases del Estado Islámico (EI) en Siria violan la legalidad internacional e instó a que se coopere con el régimen de Bachar al Asad para frenar el avance de los yihadistas.

“Cualquier acción internacional y, sobre todo, con uso de la fuerza, para combatir la amenaza del terrorismo debe llevarse a cabo en conformidad con el derecho internacional y con el acuerdo de los países en los que se llevan a cabo este tipo de operaciones”, dijo Lavrov.

El ministro ruso criticó la estrategia estadounidense en la zona y urgió a “establecer una cooperación con las autoridades sirias”, incluso ahora que ya hay “hechos consumados”.

Según Lavrov, excluir a Damasco de la lucha contra los yihadistas del EI, “no sólo va en contra de la legalidad”, sino que resta eficacia a los esfuerzos.

“Por razones pragmáticas, deberíamos ser incluyentes y todos los actores que puedan contribuir deberían estar en el mismo equipo”, opinó.

Además, insistió en que pensar que el terrorismo se va a terminar si Al Asad abandona el poder es un error y recordó que el fenómeno actual tiene sus raíces, entre otras cosas, en la situación que se creó en Irak tras la intervención de Estados Unidos contra Sadam Husein.

Para ilustrar su postura, también hizo referencia al caos reinante en Libia, tras la campaña de ataques que terminó con el régimen de Muamar el Gadafi.

Preguntado por la coalición contra el EI impulsada por Estados Unidos, Lavrov dijo que Rusia combate el terrorismo “constantemente, no sólo cuando alguien anuncia una coalición”.

En ese sentido, defendió que la mejor fórmula contra los extremistas es reforzar la capacidad de los países de Oriente Medio para hacerles frente, lo que incluye tanto a Irak como a Siria.

Así, explicó que su Gobierno suministra armas y equipamiento a los países de la zona, ha formado a especialistas locales y coopera con los servicios de inteligencia.