La salud de Zaghari-Ratcliffe es buena y no tiene coronavirus, según Irán

Las autoridades iraníes negaron este martes que Nazanin Zaghari-Ratcliffe, la mujer británico-iraní encarcelada en Teherán por espionaje, haya contraído el coronavirus y dieron a entender que podría beneficiarse de un permiso penitenciario.

“Tiene una salud completa y ayer se comunicó con su familia”, dijo el portavoz del Poder Judicial, Gholamhosein Esmaili, después de que el marido de la encarcelada, Richard Ratcliffe, denunciara que su mujer temía estar contagiada de coronavirus.

Esmaili agregó en su rueda de prensa, celebrada por videoconferencia debido a la expansión del coronavirus en Irán, que “se han hecho los preparativos para que un preso se vaya de vacaciones entre hoy y mañana”.

A causa de la propagación del coronavirus, que ha causado al menos 77 muertos en Irán, las autoridades penitenciarias han dado permiso para salir de la cárcel a más de 54.000 presos.

Por su parte, el embajador iraní en Londres, Hamid Baeidineyad, escribió en Twitter, citando las palabras del portavoz judicial, que “a uno de los presos con cargos de seguridad se le otorgará un permiso hoy o mañana para unirse a su familia”.

El embajador tampoco precisó si se trata de Zaghari-Ratcliffe pero negó asimismo en su mensaje que la mujer esté contagiada de coronavirus.

Zaghari-Ratcliffe, empleada de la Fundación Thomson Reuters, fue arrestada en 2016 durante un viaje a Irán y condenada a cinco años de cárcel por delitos contra la seguridad del Estado, que ella niega.

La mujer ha llevado a cabo un par de huelgas de hambre para denunciar su situación pero, hasta ahora, las autoridades iraníes se han negado a darle la libertad condicional o cualquier tipo de permiso penitenciario.