La sospechosa del atentado de Bangkok defiende su inocencia desde Turquía

La tailandesa presuntamente implicada en el atentado con bomba de hace dos semanas en Bangkok negó tener ninguna relación con el caso desde Turquía, donde reside junto a su marido, informaron hoy fuentes oficiales.

La policía logró ayer una orden de arresto contra Wanna Suansan, de 26 años, además de otra contra un extranjero cuya identidad y nacionalidad no han sido reveladas.

La mujer, cuyo nombre musulmán es Maisaroh, alquiló al otro sospechoso un apartamento en Minburi, un suburbio al este de la capital, donde la policía encontró material para fabricar explosivos durante una redada el fin de semana.

Tras emitir la orden de arresto, la policía registró una casa en la provincia de Phang Nga, en el sur del país, donde reside su familia, que declaró que Wanna se encuentra en Turquía desde principios de julio y que ésta negó toda relación con el caso.

El jefe de la policía, Somyot Pumpanmuang, confirmó hoy haber contactado con la mujer y que esta se mostró dispuesta a regresar a Tailandia para probar su inocencia, en declaraciones recogidas por el canal público Thai PBS.

Las dos órdenes de arresto de ayer se añaden a las otras dos emitidas con anterioridad contra dos personas que fueron grabadas por cámaras de seguridad de la zona donde estallaron dos bombas los días 17 y 18 de agosto.

Uno de ellos es el principal sospechoso, un hombre con camiseta amarilla al que se ve dejando una mochila en el céntrico templo de Erawan momentos antes de la explosión que causó 20 muertos y más de cien heridos.

El cuarto es otro hombre que aparece en imágenes lanzando otro paquete al río, justo al lado del embarcadero donde al día siguiente estalló otro artefacto sin causar heridos.

Según el diario Bangkok Post, que cita fuentes policiales, ambos sospechosos habrían huido a Camboya, cuyas autoridades fueron alertadas por Tailandia.

Hasta el momento una persona ha sido detenida por su presunta relación con el atentado.

Se trata de un extranjero de 28 años arrestado el sábado durante un registro en un apartamento en el este de la ciudad donde la policía encontró material para fabricar explosivos, bolas metálicas como las de la bomba del atentado y decenas de pasaportes turcos falsos.

Las autoridades no han confirmado la nacionalidad del detenido, que sigue siendo interrogado en una base militar y que inicialmente negó tener cualquier relación con el caso.

El portavoz de la junta militar, Winthai Suvaree, aseguró en una nueva declaración televisada que el resultado de este interrogatorio ha sido “muy beneficioso” y que llevará a nuevas detenciones.

Winthai también dijo que la investigación avanza a partir de declaraciones de testigos y pruebas forenses, pero indicó que solo se hará pública la información que haya sido confirmada.

Múltiples declaraciones confusas y contradictorias por parte de la policía y la junta militar han marcado la investigación y, dos semanas después, se sigue sin tener una idea clara de la autoría y los motivos detrás del atentado, que no ha sido reivindicado.