El fiscal pide mas tiempo y un nuevo experto en una nueva audiencia de Pablo Ibar

El fiscal del caso del español Pablo Ibar, cuya condena a muerte por tres asesinatos fue anulada en 2016, pidió hoy al juez más tiempo para prepararse para el nuevo juicio y que se sume otro psicólogo al caso, además del contratado por la defensa, informaron a Efe fuentes cercanas al acusado.

Estos fueron los principales temas de una audiencia preparatoria de seguimiento de apenas media hora celebrada hoy, en la que estuvo presente Ibar, con traje de presidiario de rayas blancas y negras.

A la sesión, en la sede de los tribunales de Fort Lauderdale, a 48 kilómetros de Miami, acudieron el padre de Ibar, Cándido Ibar; la esposa, Tanya Ibar, y dos hermanos del acusado, quien deberá responder otra vez ante la justicia de tres asesinatos cometidos en 1994 en el sur de la Florida y hasta ahora no resueltos.

El juez reservó las fechas del 5 y 6 de abril para la próxima cita de estas características.

Las dos peticiones del fiscal, a las que el juez debe responder, pueden retrasar el inicio del nuevo juicio a Ibar, ordenado por la Corte Suprema de Florida en febrero pasado, cuando anuló el del año 2000, en el que fue condenado a muerte, por considerar que las pruebas existentes en su contra eran “escasas” y “débiles”.

La defensa, encabezada por Benjamin Waxman, ha contratado al psicólogo Ronald Fisher, profesor de la Universidad Internacional de Florida, con el fin de que se suprima un testimonio que se incluyó en el anterior juicio y que es desfavorable a Ibar, de 44 años.

El fiscal pidió hoy que se consulte a otro experto, además de a Fisher, sobre el testigo Gary Foy.

En el primer juicio Foy declaró que, al día siguiente del crimen, vio a dos hombres saliendo de la vivienda donde fueron asesinados Casimir Sucharsky, propietario de la casa y dueño de un club nocturno, y las modelos Sharon Anderson y Marie Rogers.

En una rueda de reconocimiento fotográfico y en otra física previa al juicio, Foy identificó a Ibar como uno de esos hombres que iban a bordo del automóvil de Sucharsky.

Pero Fisher, en una declaración jurada que hizo el año pasado, subrayó que los procedimientos utilizados por la Policía afectaron psicológicamente a Foy al “sugerirle innecesariamente”, y eso condujo a la “falsa identificación” de Ibar como la persona que vio.

Pablo Ibar era sobrino del boxeador español José Manuel Urtaín, fallecido en 1992.