El vicepresidente colombiano descarta volver a ser compañero de fórmula de algún candidato

El vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, descartó hoy volver a acompañar a “ningún candidato”, después de que el actual gobernante, Juan Manuel Santos, anunciara su intención de presentarse a la reelección en mayo de 2014.

En declaraciones a la emisora Blu Radio, Garzón confirmó la decisión que ya había hecho pública antes del anuncio firme del presidente de ayer, al tiempo que aseguró que su voluntad una vez termine su periodo como vicepresidente es presentarse como candidato a la Alcaldía de Bogotá o de Cali en 2015.

“Ya es de público conocimiento que no quiero ser fórmula presidencial de ningún candidato o candidata a la Presidencia de la República. Yo no puedo cambiar mi posición”, anotó.

Garzón agregó que será vicepresidente por mandato popular hasta el 7 de agosto de 2014 y que, hasta entonces, tiene que concluir su tarea y “seguir trabajando por la promoción y respeto a los derechos humanos y por la paz”, pues “la violencia, el odio y los muertos serán cosa del pasado” en Colombia.

Santos anunció ayer que el próximo lunes, 25 de noviembre, registrará su candidatura en el órgano electoral colombiano para un segundo mandato, que le permitiría seguir sus planes hasta 2018, incluidas las negociaciones de paz con las FARC.

El vicepresidente se limitó a reconocer que la aspiración a la reelección es un “derecho” que tiene Santos, al tiempo que señalaba como “deber” del presidente seguir trabajando por la paz en el país, tras medio siglo de conflicto armado interno.

Por su parte, el ministro consejero para el Diálogo Social, Luis Eduardo Garzón, resucitó en la emisora RCN La Radio el debate sobre la permanencia de la figura del vicepresidente en Colombia y señaló que el cargo “no tiene ningún papel fuerte en la actualidad”.

“Yo creo que Angelino Garzón ha hecho un trabajo extraordinario, pero a mi juicio esa figura debería ser cambiada por la función de un ministro delegatario”, agregó el ministro consejero.

En junio de 2012, cuando el vicepresidente sufrió un accidente cerebral y se vio afectado por un cáncer de próstata, Santos afirmó que la desaparición de la Vicepresidencia estaba en estudio porque quedó “mal diseñada” en la Constitución de 1991 y podía ser más idónea la de “designado presidencial”.

El designado presidencial era un cargo existente en Colombia hasta la Constitución de 1991, elegido por el Congreso para sustituir al presidente en circunstancias especiales.