Un 8 % ha votado al mediodía en referéndum sobre perforaciones en Italia

El 8 % de los italianos con derecho a voto han participado al mediodía en el referéndum convocado para revisar la duración de las perforaciones petrolíferas en el mar territorial del país y poner fin a su presencia en este área.

A la consulta han sido llamados un total de 51 millones de italianos que podrán votar hasta las 23.00 de la noche (21.00 GMT) y después el primer ministro italiano, Matteo Renzi, comparecerá ante los medios para valorar los primeros resultados.

Para que el referendo sea considerado válido es preciso que alcance la participación de la mitad más uno de los italianos con derecho a voto, algo que muchos ponen en duda.

El Ministerio del Interior informó en su página de internet que la participación al mediodía se situaba en el 8,35 %.

Las regiones que más afluencia registraban a esa hora fueron las sureñas Apulia y Basilicata (10,86 % y 11,44 % respectivamente) y el septentrional Véneto (10,28 %), mientras las que menos fueron las meridionales Calabria (5,74 %), Campania (6,22 %) y Sicilia (6,36 %).

La consulta afecta únicamente a los pozos de petróleo y gas situados en aguas territoriales italianas, es decir, entre la línea de costa y las primeras doce millas (unos 22 kilómetros) de mar.

Las perforaciones en ese espacio están prohibidas desde el 2006 gracias a una ley aprobada aquel año y que, al mismo tiempo, permitía que las plataformas que operaban en la zona con anterioridad a la norma continuaran haciéndolo, ofreciéndolas además hacerlo hasta agotar los recursos.

En el referendo, promovido por ocho regiones, se pregunta a los electores si desean la abolición de la cláusula en la que se permite la explotación “durante toda la vida útil del yacimiento”.

De acuerdo a la legislación vigente, una petrolera recibe una primera concesión de explotación por 30 años, pudiendo renovar después el contrato hasta en tres ocasiones por un total de 20 años y, posteriormente, solicitar la explotación total del yacimiento.

Por esa razón, en caso de que gane el “sí” y se alcance el quórum, estas plataformas deberán abandonar los yacimientos cuando venza el contrato de explotación, impidiendo la extracción indefinida y poniendo fecha de caducidad a su presencia en aguas territoriales italianas.