Australia impone sanciones contra 5 militares birmanos por crisis de rohinyás

El gobierno de Australia anunció hoy la imposición de sanciones financieras y la prohibición de entrada a su país para cinco altos mandos militares birmanos por violaciones contra los derechos humanos de la minoría rohinyá.

“La crisis de los rohinyás es la crisis humanitaria más grande en la región. La reciente misión investigadora de la ONU determinó que se han registrado crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, como el genocidio, en el estado de Rakáin”, en el oeste de Birmania (Myanmar), dijo en un comunicado la titular australiana de Exteriores, Marise Payne.

Más de 700.000 rohinyás huyeron a Bangladesh a raíz de una ofensiva del Ejército birmano iniciada el 25 de agosto de 2017 tras el ataque de un grupo insurgente de esta minoría contra una treintena de puestos de la policía fronteriza.

Médicos Sin Fronteras calcula que al menos 6.700 rohinyás -incluidos 730 niños- murieron como consecuencia de la violencia desatada por los militares, mientras que Naciones Unidas eleva a 10.000 la cifra de víctimas mortales.

Los soldados han sido acusados de cometer asesinatos, violaciones y quema de hogares de los rohinyá en lo que un grupo de expertos de la ONU vio evidencias de “genocidio intencional” y crímenes contra la humanidad “perpetrados a gran escala”, según denunció en un informe.

Tanto el Ejército birmano como el Ejecutivo de Naipyidó, liderado de facto por la nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, niegan cualquier delito de las autoridades y culpa de la crisis a los “terroristas bengalíes”, como denomina al grupo insurgente rohinyá.

Birmania no reconoce la ciudadanía a los rohinyás, a los que considera inmigrantes, y les somete desde hace años a todo tipo de discriminaciones, incluidas restricciones a la libertad de movimientos.