Cañete: “No sería lógico que el acuerdo de París entrara en vigor sin la UE”

El comisario europeo de Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, hizo hoy un llamamiento a los países europeos y las instituciones comunitarias para acelerar la ratificación del acuerdo climático de París, ante el riesgo de que el bloque no llegue a tiempo para su entrada en vigor.

“No tendría sentido que la Unión Europea (UE) no estuviera cuando entre en vigor”, aseguró Cañete a Efe en una conversación telefónica desde Nueva York, donde hoy un nuevo grupo de partes han ratificado el pacto climático.

Ya son 60 socios los que han dado este paso que la UE aún no logra concretar, aunque juntos no llegan a representar el 55 % de las emisiones mundiales, requisito necesario para que comience a aplicarse el acuerdo.

No obstante, el paso dado por Estados Unidos y China -que suman juntos cerca de un 40 % de las emisiones globales- a principios de mes ha acelerado un proceso que se esperaba que tomara más tiempo y que ha pillado a la UE con el paso cambiado.

Los países que ya han ratificado suman un 47,6 % de las emisiones mundiales, por lo que una reacción ágil de la UE -que representa el 12 %- haría posible que el acuerdo se aplique ya para la cumbre climática COP22, que se celebrará en Marrakech entre el 7 y 18 de noviembre.

Pero el bloque también se arriesga a que otros socios den el paso antes que ella y se alcance el mínimo necesario sin su participación.

“Solo falta un 8 % y no sería lógico que el acuerdo entrara en vigor sin la parte que se ha marcado el objetivo propio de reducción de emisiones más ambicioso, con una reducción de las emisiones del 40 %”, avisó Cañete.

Pese a que la Unión Europea es tradicionalmente el líder mundial en materia de aplicación de políticas contra el cambio climático, se arriesga a no formar parte de los socios que harán entrar en vigor el primer e histórico acuerdo global para la reducción de emisiones.

“La ratificación de la Unión Europea es ahora más crucial que nunca”, añadió el responsable de la Comisión, que en diciembre en París buscó movilizar a varios socios internacionales y forjar la autodenominada “coalición de la alta ambición” en la lucha contra el cambio climático.

La UE es pionera en la aplicación de políticas climáticas y “la parte que más en serio se toma la cuestión de la aplicación” de las medidas contra el calentamiento global, recalcó Cañete, quien se mostró favorable a una “ratificación temprana”.

Los Veintiocho reunirán a sus ministros de Medio Ambiente el viernes 30 en un encuentro extraordinario en el que pretenden dar un impulso a la ratificación del acuerdo a nivel comunitario, para tratar de formalizarla a principios de octubre.

La UE y sus Estados miembros tienen que ratificar el acuerdo a nivel comunitario (en nombre de la Unión como tal) y país por país, con unos procesos nacionales que suelen ser complejos y que no da tiempo a finalizar antes de la cumbre de Marrakech.

Actualmente solo Francia -la anfitriona del acuerdo de París-, Austria y Hungría han ratificado el acuerdo, a los que se espera que se sumen Alemania, Eslovaquia y Portugal de manera inminente.

Para evitar quedarse fuera de un acontecimiento histórico en la lucha contra el cambio climático se ha optado por acelerar la ratificación del acuerdo por parte de la UE como bloque, de modo que los países se comprometan individualmente a seguir su ejemplo tan pronto como sea posible.

Durante el encuentro de embajadores ante la Unión Europea celebrado hoy, ningún país se ha opuesto a este proceso acelerado, aunque persisten algunas dudas y reticencias que se espera queden resueltas en una declaración que los ministros aprobarán el día 30 en su consejo extraordinario.

Si la UE ratifica el acuerdo a principios de octubre -para lo que necesita también el apoyo de la Eurocámara, que podría pronunciarse al respecto en su sesión plenaria del 3 al 6 de ese mes-, el acuerdo podría entrar en vigor a tiempo para la reunión de Marrakech.

Cañete se mostró “esperanzado” en sus declaraciones a Efe, en las que insistió en su mensaje a las capitales sobre la importancia de finalizar este proceso “rápido”.