El Gobierno financiará al 50 por ciento la demolición y desescombro de El Algarrobico

El ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) participará al 50 % tanto en los gastos de demolición del hotel El Algarrobico en el Parque Natural de Cabo de Gata (Almería), como en los de desescombro y restauración ambiental de esta playa protegida.

Aunque el protocolo suscrito entre el Gobierno y la Junta de Andalucía en 2011 hablaba de que el Ejecutivo central se haría cargo de la demolición y el segundo de la restauración, la titular del Magrama, Isabel García Tejerina, ha confirmado hoy que su departamento asumirá la mitad del coste de ambas actuaciones, cifradas en total en algo más de siete millones de euros.

“Es la manera más sencilla de ser solidarios con esta actuación a pesar de no tener competencias porque la zona donde se encuentra el hotel no pertenece al Gobierno central sino a la Junta de Andalucía”, ha puntualizado la ministra.

Estas declaraciones a los medios se producían tras una reunión celebrada esta tarde en Madrid con el consejero de Medio Ambiente andaluz, José Fiscal, donde ambos han acordado la creación de una comisión mixta para estudiar los pasos a seguir para demoler el polémico hotel después de que el Tribunal Supremo fallara el 18 de febrero que se ubica en terreno no urbanizable.

La citada comisión estará integrada por seis miembros (tres del ministerio y tres de la consejería) y comenzará a trabajar la próxima semana.

Su primer objetivo será “ofrecer un estudio a fondo de las sentencias” sobre El Algarrobico, ya que “queremos que la demolición se haga con todas las garantías, en el menor tiempo posible y sea irreversible”, ha incidido García Tejerina.

El consejero ha ratificado las palabras de la ministra y ha subrayado que “una vez despejado el horizonte jurídico sólo queda demoler El Algarrobico tan pronto como sea posible”.

Preguntado por fechas Fiscal ha recordado a los periodistas que “sólo hace once días que se produjo la sentencia” del Supremo desestimando la posibilidad de que el hotel fuera legalizado, lo que indica que “estamos en una recta final que conducirá a la demolición de este monumento al disparate urbanístico y a devolver la zona a como estaba antes de su existencia”.

La Junta de Andalucía, que en su momento dio licencia para que se construyera el hotel y más tarde la recurrió ejerciendo un derecho al retracto que le ha sido concedido, debe ahora inscribirse los terrenos en el registro para que figuren como de su propiedad y pueda ejecutar la demolición.

Sin embargo, ni la ministra ni el consejero han concretado fechas para el derribo del hotel, algo que deberá determinar esta recién creada comisión.

Por su parte, la exministra de Medio Ambiente (2004-2008) Cristina Narbona ha declarado hoy a Efe que El Algarrobico podría haber desaparecido hace ocho años, en base a un acuerdo de permuta al que ella misma llegó con la promotora a comienzos de 2008 y que, según su versión, no salió adelante por producirse en vísperas electorales.

La exministra ha asegurado que los técnicos del ministerio que dirigía identificaron en 2008 una parcela urbanizable en El Toyo, un nuevo desarrollo situado a las afueras de la ciudad de Almería y en las proximidades del Parque Natural de Cabo de Gata, que los promotores del hotel El Algarrobico aceptaron como permuta.

Sin embargo, cuando Narbona lo presenta para su aprobación al entonces ministro de Economía Pedro Solbes, éste considera que la operación es correcta pero argumenta que no “ve oportuno” ejecutarla hasta después de las elecciones generales del 9 marzo, según relata la actual consejera del CSN.

El acuerdo al que Narbona había llegado con la empresa quedó olvidado en un cajón cuando está no renovó al frente de Medio Ambiente en el segundo Ejecutivo socialista que presidió José Luis Rodríguez Zapatero, en el que las competencias de Medio Ambiente pasaron a Elena Espinosa.

Ocho años después, el esqueleto de hormigón del hotel permanece abandonado en este espacio natural almeriense a la espera de los plazos que determine la nueva comisión mixta.