Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

Indios y afrodescendientes discuten sus problemas en el corazón de Brasil

Indios y afrodescendientes discuten sus problemas en el corazón de Brasil

EFE

San Jorge (Brasil) —

0

Una decena de etnias indígenas y el mayor grupo de afrodescendientes de Brasil se encontraron este mes en Parque Nacional de la Chapada dos Veadeiros, en el corazón del país, para discutir sus problemas en común y los desafíos de sus pueblos.

Desde hace diez días, representantes de las etnias Fulni-ô, Kayapó, Yawalapiti, Truká, Krahô, Wauará, Kamayurá, Xavante y Kariri-Xocó, entre otras, realizan reuniones y actividades culturales diarias en una aldea construida para la ocasión cerca de San Jorge, un municipio de unos 500 habitantes en el céntrico estado de Goiás y a 260 kilómetros de la capital de Brasil.

En el XIV Encuentro de Culturas Tradicionales, cuya clausura está programada para el sábado próximo, también participan miembros de la comunidad “quilombola” Kalunga, el mayor núcleo brasileño de descendientes de africanos huidos de la esclavitud siglos atrás.

Además de celebrar ritos religiosos y de exponer sus artesanías, música y danza, los asistentes comparten las dificultades y desafíos de sus pueblos. Entre sus principales preocupaciones destacan el reconocimiento y la demarcación de tierras tradicionales, la lucha contra el racismo y la preservación de su cultura y lengua propia.

“Con (la presidenta) Dilma (Rousseff) nuestra situación es más difícil que con Lula (el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva)”, explica a Efe el cacique Toé de la etnia Fulni-ô, quien asiste al encuentro desde hace ocho años.

Un estudio del Consejo Misionario Indigenista divulgado este mes reveló que el Ejecutivo de Rousseff tiene la media más baja de demarcación de tierras indígenas en Brasil del período democrático.

Según Toé, su pueblo sigue enfrentando la invasión de sus tierras por parte de grandes terratenientes y las autoridades brasileñas no respetan la ley que reconoce la justicia indígena dentro de sus territorios.

“Algunos criminales entran en la reserva para huir de la policía y la policía irrumpe con violencia en nuestras aldeas”, explica.

“Creemos que podemos cambiar la sociedad y crear un Brasil diferente a partir de nuestra historia”, explica la militante negra Marta Cezaria ante un nutrido grupo de mujeres Kalunga, a lo que el líder kayapó Takarumá responde que “indios y quilombolas tenemos que unirnos para defender los derechos escritos en la Constitución”.

Según Juliano Basso, principal impulsor de este proyecto, su objetivo es propiciar el diálogo entre pueblos tradicionales de Brasil y acercar su sabiduría al resto de la sociedad.

“El pueblo brasileño surgió de la mezcla de culturas, pero solo nos quedamos con la idea europea de desarrollo y queremos agregar otras nociones diferentes”, explica Basso a Efe.

“Aquí vemos la manera de vivir de pueblos que conviven con la naturaleza”, agrega Basso, para quien “se siguen perdiendo culturas en Brasil, y cuando desaparece un pueblo se pierde la experiencia de quien consiguió crear toda una tecnología de vida”.

Basso agrega que la Aldea Multiétnica, con chozas típicas de los pueblos Xinguana, Krahô, Kayapó y Fulni-ô, es un ejemplo de sustentabilidad ya que está construida por los participantes con materiales del entorno y dispone de una huerta y un gallinero.

Una familia Kalunga de cuatro miembros se encarga de mantener la aldea durante los días del año que no se celebra el evento.

“Los indios no son cosa del pasado sino del futuro, hay que llevar el conocimiento indígena al conjunto de la sociedad”, declara el diseñador brasileño Marcelo Rosenbaum durante su visita a la Aldea Multiétnica, donde cientos de ciudadanos brasileños y de otros países conviven día y noche con las familias indígenas y “quilombolas” que participan en el evento.

El encuentro también fomenta la “economía creativa”, lo que permite a las etnias participantes obtener ciertos ingresos mediante el intercambio y la venta de artesanía y la puesta en marcha de talleres de pintura corporal.

Los organizadores explicaron a Efe que este año tuvieron que anunciar la celebración del evento “en el último minuto” debido a que “el Mundial y las elecciones de octubre” mermaron el interés de los patrocinadores y de los organismos públicos para financiar el encuentro.

Según datos del Gobierno, actualmente existen 896.917 indios de 241 etnias y 1.838 comunidades quilombolas en Brasil. Luna Gámez y José Bautista

Etiquetas
stats