Jóvenes paraguayos exigen a las autoridades promover más políticas públicas

Un grupo de jóvenes paraguayos se dirigieron este jueves a los ministros presentes en un acto del Día Mundial de la Población para exigirles más políticas públicas enfocadas a atender los problemas de la juventud, como la escasa formación educativa, las carencias sanitarias o las altas tasas de embarazo.

Los jóvenes tomaron la palabra durante la presentación de una iniciativa del Fondo de Población de Naciones Unidas (Unfpa), a la que acudieron la ministra de la Niñez y la Adolescencia, Teresa Martíne; el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, y el titular de la Secretaría Nacional de la Juventud, Felipe Salomón, el que más críticas recibió.

Los jóvenes cuestionaron que Salomón desoyera sus continuas peticiones de reunión, desatendiera sus invitaciones a actividades y le exigieron “políticas públicas reales” desde su Secretaría, más allá del cuestionado Servicio Militar Obligatorio (SMO).

También pidieron educación sexual integral en las escuelas, reconocimiento de la diversidad sexual y atención urgente a las altas tasas de embarazo juvenil, de menores de entre 10 y 14 años, con un incremento del 62,6 % entre 2004-2013, según los datos del Unfpa.

Chiki Cardozo, Ulises Mediana y Daniel Ortellado, tres de los jóvenes que interpelaron a las autoridades, comentaron a Efe tras el evento que no quisieron dejar pasar la oportunidad porque era la primera vez que se veían cara a cara con ellos.

Ortellado denunció que las políticas públicas solo tienen en cuenta a “un sector privilegiado”, mientras que para Cardozo son medidas “partidistas” destinadas a los afines al Gobierno, que dejan de lado “la diversidad juvenil” que existe en el país.

Los tres coincidieron en que el Ejecutivo debe apostar por medidas que tengan “mayor incidencia para adolescentes y jóvenes”.

La representante nacional del Unfpa en Paraguay, Rocío Galeano, aseguró a Efe que no le sorprendió la reacción de los jóvenes, con los que suelen trabajar para conocer sus necesidades y propuestas.

“Menos del 1 % del producto interior bruto (PIB) se destina a esta población, que es mayoritaria y estratégica para el país. Existe más de un millón de jóvenes fuera del sistema educativo, el acceso a salud sexual y reproductiva es deficiente, tenemos altas tasas de empleo no formal y no decente en esta población...”, lamentó Galeano.

Aunque desde el Unfpa se observan algunos avances gubernamentales, Galeano insistió en que todavía se requiere “una inversión en capital humano y en capital social, fundamentalmente en áreas como salud, educación, protección, empleo...” para llegar a los 2 millones de jóvenes con los que cuenta la población paraguaya, cuyo censo asciende a unos 7 millones de personas.

Además recordó que el país afronta todavía “un debate inconcluso” a la hora de elaborar políticas públicas con enfoque de derechos, ya que existen grupos de la sociedad, también presentes en las mesas de diálogo, para “los que priman los dogmas de sus propias creencias sobre el acceso a derechos de la población”.

Tampoco se sorprendió por las declaraciones de los jóvenes el ministro de Salud, quien comentó a Efe que “tienen razón en gran medida”.

“En el ámbito de salud, nosotros estamos abordando muchas de las problemáticas. Estamos claramente identificados con la necesidad de una educación sexual y reproductiva que sea integral, lo hacemos desde un modo democrático, donde ponemos sobre la mesa para que decidan los adolescentes y jóvenes todas las opciones”, explicó el ministro.

En cuanto a los embarazos infantiles y adolescentes, Mazzoleni apostó por “desnaturalizar esa convivencia de menores con mayores” y “denunciar los abusos sexuales que se dan”, pero descartó modificaciones en la ley del aborto, puesto que existe “una normativa muy clara en contra de eso”.

“Es una cuestión que debe tratarse en otro nivel y es mucho más amplia. Yo, en mi opinión personal, como médico, estoy en contra del aborto, pero entiendo que son cuestiones que en su momento el Paraguay va a definir si es o no apropiado para una discusión”, agregó el ministro.

Mazzoleni admitió también que existen “muchas deudas con la diversidad que hay en términos de orientación sexual” y abogó por “tener una conducta y una postura siempre abierta” desde el ámbito de la atención sanitaria.