Kim Jong-un despide a los turistas chinos heridos en un accidente de autobús

El líder norcoreano, Kim Jong-un, despidió personalmente la noche del miércoles a los turistas chinos heridos en un reciente accidente de autobús acaecido en su país y que partieron en un tren fletado para repatriar los restos de 32 fallecidos, informaron hoy los medios estatales.

Kim subió al tren antes de su partida para reunirse nuevamente con los heridos y “ofrecerles palabras de consuelo”, informó hoy la agencia estatal KCNA, y transmitió sus “profundas condolencias y disculpas a las familias de las víctimas del inesperado y trágico desastre” a las autoridades chinas presentes.

El accidente, que tuvo lugar el pasado domingo en el condado de Pongsan, en la provincia de Hwanghae del Norte, dejó 32 turistas chinos muertos y dos heridos de gravedad a los que Kim ya visitó en el hospital, además de cuatro ciudadanos norcoreanos fallecidos.

El líder norcoreano ha ordenado investigar el accidente y “tomar medidas contundentes para evitar completamente la recurrencia de semejante accidente”, según detalló KCNA.

Kim envió además en la víspera un mensaje dirigido al presidente chino, Xi Jinping, y el Gobierno de aquel país, para transmitirles su pésame por el hecho de que sus “amigos chinos, que vinieron aquí (a Corea del Norte) con sentimientos de amistad hacia nuestra gente, se encontraran con un accidente inesperado en nuestra tierra”.

En su nombre y el del pueblo norcoreano, Kim ofreció una “profunda disculpa a los camaradas chinos por el dolor (causado), que no puede aliviarse con ninguna palabra, consuelo o compensación”.

Kim ya ofreció su pésame con anterioridad en una visita a la embajada china en Pyongyang, la primera recogida por los medios nacionales desde su llegada al poder a finales de 2011.

Estos gestos se producen en un momento de mejora de las relaciones con Pekín tras una época de distanciamiento debido a los programas armamentísticos del régimen.