Sordo ve condiciones objetivas para el conflicto si no hay pacto salarial

El aún secretario general de CCOO de Euskadi y candidato a dirigir el sindicato en España, Unai Sordo, considera que sería “muy oportuno” lograr un pacto salarial con la patronal CEOE y opina que, si no se consigue, hay “condiciones objetivas mucho más claras” para “un proceso de conflictividad”.

El dirigente sindical ha analizado en una entrevista con Efe la actual situación socio-laboral, a escasos días de ser relevado al frente del sindicato vasco en el congreso que éste celebrará los días 1 y 2 de junio en Vitoria.

Todo apunta a que un mes más tarde Sordo se convertirá en el secretario general de CCOO, en sustitución de Ignacio Fernández Toxo, a partir del XI Congreso Confederal de la organización, que se celebrará entre el 29 de junio y el 1 de julio.

Según su análisis, existe en CCOO un grado de cohesión interna en torno a su proyecto muy importante, que permite al sindicato estar en disposición de dar un salto en materia organizativa para acercarse a la realidad de las “precariedades variadas” que existen en los centros de trabajo e incorporar a la acción sindical a nuevos colectivos laborales surgidos en los últimos años.

El responsable sindical no ha descartado un aumento de la conflictividad laboral si el crecimiento macroeconómico se hace compatible “con mayores tasas de precariedad” y no se traslada a una mejora de las condiciones laborales y salariales tras años de deterioro.

Según ha advertido, eso es “un foco de conflictividad en el medio plazo” y “gasolina para la movilización y la confrontación”.

Para Sordo, sería “muy oportuno” poder alcanzar un pacto salarial y de negociación colectiva con la patronal que permitiese una recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores, así como el desbloqueo de situaciones de convenio colectivo ahora bloqueadas.

De no lograrse, “se dan condiciones objetivas mucho más claras para que haya un proceso de conflictividad”, ha avisado.

Según ha argumentado, si en la salida de la crisis la mejora de la economía “no se traslada a la realidad de los trabajadores, se generan condiciones para una mayor conflictividad porque la gente quiere recuperar derechos”, lo cual es “de justicia”, ha sostenido.

Sordo, quien ha señalado que la unidad de acción con UGT es estratégica, se ha referido al escenario socio-laboral en Euskadi, donde desde hace años existe una división sindical entre los sindicatos nacionalistas y los de ámbito estatal.

Según ha considerado, los nacionalistas ELA y LAB “van a meterse en una dinámica de confluencia en clave más política que sindical”, que va a “complicar todavía más” la situación de bloqueo que sufre la negociación colectiva en Euskadi y las relaciones entre sindicatos y de éstos con la patronal.

En su opinión, van a pretender llevar “esa especie de acumulación de fuerzas soberanistas a las relaciones laborales”, lo que supondrá “un deterioro de derechos porque la negociación colectiva y la acción sindical se hacen subalternas de las prioridades políticas de las direcciones de estos sindicatos”.

Según ha indicado, “hay una especie de acuerdo tácito cuando se han dado estas unidades de acción, donde LAB renuncia al modelo sectorial de negociación colectiva y ELA avala determinados procesos políticos que seguramente le puedan venir bien a la izquierda abertzale”.

Sordo ha reprochado, asimismo, el apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado para 2017 al no considerar estas cuentas buenas para salir de la crisis “en clave de mayor igualdad” social.

Sobre el acuerdo del cupo que paga Euskadi al Estado por las competencias no transferidas alcanzado entre el Gobierno y el PNV, ha considerado que la “opacidad” de la negociación sobre este asunto “flaco favor le hace al sistema de Concierto” Económico.

Según ha dicho, esa negociación “acaba apareciendo como consecuencia de un acuerdo vergonzante porque se sostiene a un Gobierno que está en una situación lamentable” debido a los últimos casos de corrupción que afectan al PP.