Willy Toledo exige en Santiago “pan, techo y dignidad” para la clase obrera

El intérprete Willy Toledo y el portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero, han mostrado hoy su apoyo a las Marchas de la Dignidad en la compostelana Plaza del Obradoiro, para reivindicar los derechos de una ciudadanía para la que reclaman “pan, trabajo y dignidad”.

“Cuando la injusticia golpea, el pueblo se levanta ante los maltratadores”, ha empezando diciendo Cañamero en este acto público, posicionando a continuación estas marchas como una herramienta clave para el pueblo ante acciones como los abusos recibidos “por parte de algunas fuerzas políticas”.

En la actualidad, “vivimos un momento clave”, el primero en la historia de la Democracia en el que el pueblo se une “con el objetivo de recuperar sus derechos”, puntualizó.

Willy Toledo manifestó públicamente la importancia de que “los políticos cumplan con sus deberes”, pues la situación cada año empeora a pesar de que los cargos políticos aseguren lo contrario.

La clase obrera reclama “pan, techo y dignidad”, lo cual pone de manifiesto la realidad en la que nos encontramos, ha contrapuesto, y ha enumerado: “ciudadanos sin casa, sin vivienda y desahuciados, mientras los fondos públicos siguen siendo destinados a la banca”.

Toledo, además, ha hecho hincapié en esta sucinta comparecencia de prensa en que “la izquierda” es la única que puede garantizar los derechos del pueblo, y ello al margen del partido del que se trate.

“El pueblo ha de ser capaz de ocupar el lugar de esas minorías que poseen mayores derechos, una posición que actualmente gozan solo unos pocos en la sociedad”, ha proseguido.

Cañamero, portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores, ha añadido que es de vital importancia saber que “lo que queda en manos ajenas al pueblo se vuelve contra el pueblo”, en relación a la representación ejercida por parte del Gobierno.

A lo largo de la rueda de prensa, se hizo alusión a la manifestación programada para el día 21 de marzo en Madrid, donde están convocados “todos los pueblos de España” para reivindicar sus derechos y su dignidad.