Madrid confía en poder levantar la mano con algunas restricciones en Navidad

Madrid, 23 nov (EFE).- El Gobierno madrileño confía en poder levantar la mano en Navidad en las restricciones impuestas para contener el coronavirus, como el límite de seis personas en las reuniones o el toque de queda nocturno, aunque esperará unas semanas para decidirlo, en función de la evolución de los datos.

La Comunidad trabaja en un plan para afrontar unas navidades “con cierta normalidad”, según ha dicho este lunes la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, con la idea de evitar una tercera ola en enero.

Ayuso ha admitido que es “pronto” para valorar si puede ampliarse el número máximo de personas en las reuniones familiares de cara a la Navidad. “Está todo abierto”, ha indicado en la presentación del Plan de Inclemencias Invernales en Rascafría.

Por su parte, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha confiado en que si la tendencia de contagios se mantiene a la baja como en las últimas semanas se puedan hacer, siempre dentro de la prudencia, “algún tipo de excepciones” en las restricciones para atajar los contagios, según ha comentado en diversas entrevistas con los medios este lunes.

Así, podría levantarse la mano en las restricciones de movilidad, en el número de personas que pueden reunirse o en los horarios del toque de queda, siempre y cuando la presión asistencial y los datos de contagios lo permitan.

Y para eso habrá que esperar a dentro de dos o tres semanas para tomar la decisión, evaluando más de cerca la situación porque el coronavirus ha enseñado que no se pueden hacer evaluaciones “a largo plazo”.

Además de los grupos de personas o el toque de queda, el equipo de Salud Pública de la Comunidad está ya estudiando qué otras medidas se podrían tomar, relativas, por ejemplo, a la salida de alumnos de fuera de la región que regresan a sus casas o a que los mayores que viven en residencias puedan salir de ellas y pasar las fiestas con sus familias.

“Estamos valorando todos los escenarios”, ha insistido el consejero, que ha seguido reclamando a los ciudadanos prudencia y “no bajar la guardia”.

De momento, la Consejería de Sanidad está valorando “cómo se mueven los ciudadanos en estas fechas” para implementar las medidas idóneas en estas circunstancias.

La presidenta ha reiterado que “cada uno tiene una parte de responsabilidad para no volver atrás” y que no se produzca “un efecto retorno” como en septiembre, por lo que ha subrayado que los ciudadanos tendrán que moverse “con más cuidado entre comunidades y a la hora de viajar desde otros países”.

En esta línea, ha comentado que habrá que incrementar los controles en el aeropuerto de Barajas, donde al igual que en el resto de aeropuertos españoles se están realizando desde hoy pruebas PCR a los viajeros procedentes de países de riesgo por coronavirus.

También ha resaltado la importancia de seguir las recomendaciones de ventilación en espacios cerrados, y ha añadido que la hostelería y los comerciantes serán “grandes aliados” en estas fechas, con medidas de seguridad específicas que presentarán mañana a los medios.

Por otro lado, el vicepresidente regional, Ignacio Aguado, ha señalado que el Gobierno espera que el cierre perimetral de la región para el puente de diciembre -entre el 4 y el 14- sea la “última gran medida” que se adopte antes de las navidades, y que a partir de ese día ya se puedan levantar parcialmente las restricciones para tener unas fiestas “razonables”.

“Eso no significa que en Navidades valga todo, no, pero sí que creo que después del trabajo bien hecho por parte de todos, también los ciudadanos, espero que en Navidades podamos levantar parcialmente las restricciones”, ha puntualizado Aguado en une entrevista de RNE.