Mil clientes y 90 empleados prueban en A Coruña el ocio nocturno

A Coruña, 12 jun (EFE).- Un total de mil clientes, un tercio de la capacidad del local, y noventa empleados, el doble de lo habitual, han asistido este sábado a la prueba piloto del ocio nocturno que se celebra en A Coruña, en la Sala Pelícano.

Es uno de los seis establecimientos que han acogido las pruebas organizadas por la Xunta para analizar la seguridad del ocio nocturno, de cara a su apertura.

También han celebrado esta cita la discoteca Tokio, en Vigo y los pubs Sónar, en Santiago; La Pomada, en Pontevedra; Keops, en Ourense y Anagrama, en Lugo.

En A Coruña, una fuerte ovación con aplausos ha surgido de entre la gente, en la larga cola, cuando se han abierto las puertas a las 21:00 horas.

Los asistentes, de todas las edades, han empezado a entrar en la Sala Pelícano después de enseñar a los porteros el informe de su prueba diagnóstica negativa, su dni, su tarjeta sanitaria y recoger la mascarilla quirúrgica que incluye la entrada, junto a una consumición.

Una vez dentro, los jóvenes han bailado al ritmo de la música. Otros, han preferido hacer uso de los reservados y tomar sus consumiciones sentados con sus allegados.

Antes de comenzar el evento, el gerente de la Sala Pelícano, Luis Diz, ha explicado en declaraciones a Efe que esta noche trabajan noventa empleados, el doble de lo habitual, para que haya “más seguridad”.

Asimismo, ha concretado que el Servicio Gallego de Salud (Sergas) instaló en el local siete medidores de CO2 homologados.

Los clientes son de edades muy diferentes, desde jóvenes de 18 hasta personas que rondan los 35, pero la mayor parte de ellos son menores de 25.

Se han repartido, tras entrar en diferentes colas, entre las dos plantas que tiene la discoteca, en la que la noche transcurre como una sesión normal, con música latina en la pista de arriba.

“Llevamos quince meses cerrados, se está haciendo muy duro, muy largo. Ya era hora de volver a abrir las puertas e intentar llegar a esa normalidad que la gente necesita”, ha subrayado.

Por su parte, el delegado territorial de la Xunta, Gonzalo Trenor, que ha supervisado el comienzo de la fiesta, ha sostenido que las expectativas son “muy buenas” porque los protocolos de seguridad son “muy estrictos”.

Estos incluyen, ha concretado, la distancia interpersonal, medidores de CO2, la distancia de al menos 1,5 metros entre mesas, pruebas PCR, aforo al 50 % en interiores y 75 % en terraza y registro de clientes.

“Vamos a recoger datos sobre cómo puede evolucionar la reapertura del ocio nocturno, que si la situación epidemiológica lo permite, se producirá el 1 de julio”, ha remarcado Trenor.

Por otra parte, desde la Consellería de Sanidad han recordado la necesidad de ser “prudentes”, usar la mascarilla y mantener la distancia social, pese al relajamiento de las medidas.

Así, el conselleiro, Julio García Comesaña, ha llamado a los alcaldes de las siete principales ciudades gallegas y al presidente de la Fegamp, Alberto Varela, para que ayuden a cumplir las normas y poder así continuar con la desescalada “gradual y paulatina”.

También les ha comentado la preocupación por la posible celebración de botellones al permitirse las reuniones al aire libre por la noche y ha incidido en que estas prácticas están prohibidas.