La presidenta estonia agradece al Vaticano que nunca reconociera la ocupación soviética

La presidenta de Estonia, Kersti Kaljulaid, agradeció en su discurso de recibimiento al país del papa Francisco que la Santa Sede nunca reconociera la ocupación soviética.

En el Jardín de las Flores del palacio presidencial, Kaljulaid tomó la palabra para agradecer que “la Santa Sede nunca reconoció la ocupación soviética manteniendo la administración apostólica vacante por razones políticas”.

“Con su autoridad moral y política, la Santa sede ha sido una fuente de poder espiritual para las naciones europeas prisioneras por el comunismo. Ha dado su inspiración, para que no pudieran hacerse con su libertad”, agregó la presidenta.

Recordó ante el papa que en la primera declaración de independencia del 24 de febrero de 1918 se garantiza la libertad del pueblo con independencia de su opinión, política, etnia o religión.

“La libertad religiosa es precisamente una de las bases” sobre las que se funda la democracia de este país, donde se registra uno de los porcentajes mayores de no creyentes del mundo y donde los católicos son el 0,5 % de la población, unos 6.000.

“Estonia se ha siempre mantenido fiel a la libertad, a la apertura de la democracia y esta ha sido la base para el rápido desarrollo de la sociedad”, explicó.

Y agregó: “Tenemos que estar atentos a defender nuestra libertad y los derechos humanos si no lo estamos podremos tener algún día despreocupado, pero nos espera un futuro cargado de preocupaciones”, en un momento en el que existen los temores sobre Rusia, tras su expansión a Crimea.

Instó a “que es necesario encontrar soluciones a los problemas del mundo, como el cambio climático y los problemas migratorios” y citó la frase del papa sobre que un “país que no protege a sus niños y a sus ancianos es un pueblo sin esperanza”.

Al respecto destacó el movimiento cívico “Let's Do It”, iniciado en Estonia hace años con iniciativas limpiar el planeta.