El transporte de Lisboa se prepara para evitar el colapso ante la Web Summit

Lisboa se prepara para acoger la Web Summit, una prestigiosa cumbre tecnológica que amenaza con colapsar la capital lusa y durante la que se reforzará el servicio de metro, se instalarán puntos de información en el aeropuerto y se pondrán a la venta billetes especiales.

Entre el 7 y el 10 de noviembre, la capital lusa, con medio millón de habitantes en su casco urbano, recibirá a más de 50.000 personas que atravesarán la ciudad para desplazarse desde sus hoteles hasta el recinto de la Feria Internacional de Lisboa y el pabellón MEO Arena, en el este, donde se celebra el congreso.

La operación promete ser un delicado juego de ingeniería en hora punta, en el que los responsables de los transportes no quieren sorpresas ni incidencias, por lo que van a reforzar una de las cuatro líneas del suburbano, la que conecta con el recinto, indicaron fuentes del metro a Efe.

Los actuales tres vagones de la línea roja se ampliarán a seis entre el 7 y el 10 de noviembre, los días de la Web Summit, en los que la previsión es que aumente en un 5 % el uso del metro, que en una jornada normal transporta a cerca de medio millón de personas.

Asimismo, se desplegará un mostrador de atención en el aeropuerto de Lisboa para “apoyo y venta a todos los visitantes que van a estar presentes en el evento”, que también podrán comprar billetes en los hoteles, medida que buscar evitar filas en las estaciones.

También se ha diseñado un pase de movilidad “personalizado” para el prestigioso congreso tecnológico, que permitirá a los usuarios pagar los billetes con tarjetas de crédito no portuguesas, una opción que hasta ahora no estaba disponible.

Este pase funcionará para el metro, los autobuses y los trenes que conectan Lisboa con las cercanas localidades de Sintra y Cascais, donde se alojarán algunos de los asistentes, en aras de “agilizar la movilidad”, ha explicado el presidente del Metro de Lisboa, Tiago Farias.

Además del metro, los asistentes a la Web Summit, entre los que figuran más de 7.000 directores ejecutivos de compañías de todo el mundo, pueden utilizar la amplia red de autobuses o decantarse por recurrir a los taxis.

La Web Summit llega en un momento en el que los taxistas están inmersos en una guerra contra la legalización de la plataforma Uber, que a su vez ha lanzado la opción de compartir vehículo durante esos días para intentar captar más clientes.

La opción que permite compartir a quienes tengan el mismo trayecto, denominada “uberPOOL”, ofrece un ahorro del 24 % con respecto a la considerada más barata de la plataforma, “uberX”, y estará disponible entre el 4 y el 13 de noviembre.

Para hacerles frente también se espera un refuerzo de los taxistas en las zonas cercanas al recinto del evento y el aeropuerto.

Al margen del área que ocupe la Web Summit, se prevé tráfico algo denso en otras zonas de Lisboa, donde varias de las principales arterias se encuentran en obras, lo que puede retrasar los desplazamientos y potenciar así la apuesta por el metro, que no alterará sus horarios.

La Web Summit es el mayor congreso que ha acogido Lisboa, que ya ha sido centro de masivas citas deportivas como la final de la Liga de Campeones que enfrentó al Atlético de Madrid y al Real Madrid en el año 2014.

Sin embargo, el evento de start ups es la prueba de fuego para el transporte por la relevancia internacional de la cita, a la que asistirán invitados de 150 nacionalidades que se llevarán a casa una imagen definitiva de la ciudad.