Diseñan un sistema para comunicarse con la orca sorda Morgan
Los entrenadores de la orca Morgan, que fue rescatada en Holanda en 2010 y trasladada con sordera severa al Loro Parque de Tenerife en 2011, han diseñado un sistema comunicativo basado en gestos y luz, con el que felicitan al animal cuando responde bien a sus peticiones.
El entrenador y supervisor de las orcas del zoológico, Rafael Sánchez, ha explicado que al poco tiempo de que la orca llegara a Tenerife, a petición de un juez holandés, los entrenadores se dieron cuenta de que Morgan no acudía a las llamadas de los silbatos de los monitores.
En ese momento, los científicos realizaron múltiples pruebas de audiometría que desvelaron que la orca tiene una deficiencia auditiva que podría ser severa e incluso absoluta, lo que ahora ha sido confirmado por un grupo de investigadores estadounidenses liderados por un científico de la Universidad de Curtin (Australia) y que se publicará esta semana en la revista científica Aquatic Mammals.
Para poder interactuar con la orca, los entrenadores colocaron focos de luces blancas dentro y fuera de la piscina. Cuando los encienden, según ha explicado Sánchez, indican a Morgan que ha hecho bien su trabajo.
Este nuevo sistema de comunicación adaptado para Morgan ya lo comprenden el resto de las cinco orcas que conviven con ella en las piscinas de Loro Parque, donde recientemente se les practicaron a todas pruebas de audición.
Según ha detallado el director adjunto de Loro Parque Fundación e investigador asociado de este estudio, el doctor Javier Almunia, estos test se realizaron mediante un método de medición de las ondas cerebrales en respuesta a estímulos sonoros, frecuentemente usado en cetáceos.
Las pruebas, similares a las que se realizan en humanos, mostraron que Morgan es la única orca del grupo que no manifestó ninguna respuesta cerebral. Sin embargo, según ha explicado Almunia, no se puede afirmar que la orca sea absolutamente sorda, ya que la gran capa de grasa que tienen estos cetáceos puede impedir que llegue la onda cerebral que no detectaron los electrodos colocados sobre la cabeza.
El director adjunto de Loro Parque Fundación ha asegurado que, si bien el resultado del audiograma de Morgan se conocía desde hace tiempo y se había trabajado con ella adaptando para ella un sistema de comunicación con el fin de lograr su integración al grupo, lo importante es que ahora se cuenta con la garantía de la revisión del trabajo por parte de científicos independientes.
Morgan, a la que se le calculan entre ocho y diez años, pesa más de 2.200 kilogramos, mide unos cinco metros y come diariamente alrededor de 40 kilos de pescado repartidos en nueve comidas, momento que los entrenadores aprovechan para realizar análisis de sangre, orina e incluso de heces.
El director adjunto de Loro Parque Fundación ha recordado que Morgan fue rescatada el 23 de junio de 2010 en las costas del mar de Waden, en la isla holandesa de Schiermonnikoog, en un estado “muy debilitado y con síntomas de deshidratación y malnutrición severa”.
La orca pesaba solo 450 kilos y no ofreció ninguna resistencia al rescate y el personal que participó en él temió que el animal no sobreviviera a la primera noche debido a la gravedad de su estado.
La orca fue desplazada al delfinario de Harderwijk donde estuvo en recuperación durante un año hasta que, bajo orden de un juzgado holandés, fue desplazada a Tenerife, a las instalaciones de Loro Parque, en el año 2011.
