La portada de mañana
Acceder
La confesión de la pareja de Ayuso desmonta las mentiras de la Comunidad de Madrid
El plan del Gobierno para indemnizar a las víctimas de abusos agita la Iglesia
Opinión - El pueblo es quien más ordena todavía. Por Rosa María Artal
Sobre este blog

Espacio de opinión de Tenerife Ahora

Garcinuño, la saga continúa (parte II)

Carlos Garcinuño, concejal de Urbanismo destituido en Santa Cruz

Lidia Rodríguez

0

El exconcejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Santa Cruz Carlos Garcinuño ha explicado esta semana las razones que le hicieron votar en contra de la adjudicación de la obra de demolición del mamotreto. No tienen desperdicio.

Carlos Garcinuño convocó una rueda de prensa donde hubo golpes para todos los gustos. Comenzó agradeciendo a los medios de comunicación el interés mostrado. Esto es algo que los políticos suelen hacer antes de abrir la caja de pandora: hacer guiños a los periodistas nunca está de más. Lo hizo antes de dar paso a las siguientes perlas: “Me han destituido por defender los intereses de los chicharreros”. Seguro que no era su intención, pero esta frase me ha recordado a una muy famosa de Miguel Zerolo, aquella de “la compra de la playa de Las Teresitas se hizo por el bien de los ciudadanos de Santa Cruz”.

Esta no fue la única perla que nos dejó Carlos Garcinuño en referencia al posible edificio de aparcamientos contemplado en el Plan Especial que sustituirá al actual mamotreto. Nos soltó un, “entre el original y la copia, me quedo con el original”, en tono socarrón. Hombre, Garcinuño, si no existiera una sentencia que dice que se debe derribar y que, si no se hace, se incurre en un delito de prevaricación, quizás podríamos quedarnos con el original.

Los dardos iban y venían según la intensidad de las preguntas de los periodistas, hasta el punto que acusó al Ayuntamiento de utilizar el derribo del mamotreto con fines electoralistas. “Mantuvo el expediente en un cajón porque políticamente no le ayudaba a ganar las elecciones”. Punto y minipunto para Bermúdez y Garcinuño

¿Habría dicho esto si no le hubieran cortado la cabeza? Este punto me recordó al conflicto de ámbito nacional entre Soria y Montoro. Al principio eran amigos, hasta que los juegos de poder y los ventiladores ocupan su función en la obra. Tras salir por la puerta de atrás, el exministro acaba contando las traiciones internas y los entresijos que todavía desconocemos en un libro publicado por El Mundo.

Mientras calificaba la adjudicación de la demolición como “insensata” e “ilegal”, le propinó otro golpe al alcalde al señalar que se pretende derribar el mamotreto con el propósito de que Bermúdez se desmarque del mandato de Miguel Zerolo. Resulta paradójico cuando lo que le preocupa a algunos es precisamente lo contrario, que no se desmarque lo suficiente.

Garcinuño nos contó su versión de la ruptura sin pronunciar ni una sola vez la palabra “mamotreto”, como si estuviera jugando al Tabú. Cada vez que quería mencionarlo lo sustituía por “el edificio de aparcamientos”. Lo dijo al principio de la rueda de prensa a los periodistas: “Ya se encargaran ustedes de ponerle un nombre”.

El exconcejal negó que lo ocurrido haya sido fruto de una venganza interna por defender la candidatura de Cristina Tavío como presidenta del PP regional, pero se mostró herido con sus compañeros de partido. El PP en el Ayuntamiento de Santa Cruz nos ha dado una clase magistral digna de la mafia italiana. Si hay algo más necesario que saber dar puñaladas, es saber recibirlas.

Sobre este blog

Espacio de opinión de Tenerife Ahora

Etiquetas
stats