Milagro
Presten atención al milagroso caso de Milagrosa, alias “La Perla”. Los tribunales la han condenado a 9 años de cárcel por corrupta, pero le dicen que ponga 15.000 euros y se libra de entrar provisionalmente en la trena. Milagrosa sigue multiplicando su azar, como en aquella hazaña de los panes y los peces. Malversación, cohecho, tráfico de influencias, pero puede quedarse en casa.
En realidad, el milagro de Milagrosa Martínez comienza cuando se afilia a Alianza Popular. Mientras vosotras, nuestras madres o nuestras abuelas, os partíais el lomo trabajando, “La Perla”, con sus collares, se convertía en alcaldesa de Novelda, presidenta de las Cortes Valencianas y consejera autonómica de Turismo. Una impresionante trayectoria para “Mila”, que contó al tribunal que la llamaban también así y afirmó: “Procuro leer poco por motivos de salud”.
Milagrosa daba estos consejos sanitarios y quizás por eso también llegó a presidenta de una Comisión de Sanidad. Toda una experta para poner nuestra salud en sus manos. Igual que Camps puso el presupuesto de Turismo: “El presidente me llamó y me dijo que me nombraba Consellera. Yo le dije: 'Presidente, ¿tú sabes lo que has hecho?' No por nada, pero yo de turismo...”. Daba igual, se trataba de firmar contratos amañados y de seguir repartiendo el dinero de todos entre los manguis de siempre, que además financian campañas electorales y dejan mordidas.
Trabajar, lo que es trabajar, Milagrosa no ha trabajado mucho. En el Parlamento valenciano fue noticia por no intervenir en ningún debate. Y, aunque dijo en el tribunal “yo soy de sudar”, era porque estaba pidiendo más aire acondicionado. Luego las cámaras nos la mostraron quedándose plácidamente dormida, mientras los demás contaban sus fechorías.
Puede que estemos ante otro de esos casos en los que Milagrosa no sea muy lista o que, en el fondo, se esté riendo de todos y se haga la tonta. Lo cierto es que llegó a ser la segunda máxima autoridad de toda la Comunidad Valenciana, le hemos pagado buenos sueldos y ha sido condenada por corrupta. Viendo su currículum, sorprende que los jueces digan que “carece de medios económicos”, porque lleva más de veinte años con cargos públicos y no ha sido precisamente mileurista.
Señalada como “mujer de paja” para los chanchullos de Camps, ella dice que dirigía Turismo, pero sin saber lo que era FITUR. Autora de otra memorable perla al decir “los consellers somos como los faraones”, restó importancia a que la Gürtel le regalara un reloj de 2.400 euros, “porque no es un avión o un barco”. Imagino que ahora pagar 15.000 euros y no entrar en la cárcel le parecerá una baratija, otro milagro para esta mujer que convierte todo lo que toca en perlas.
