'Criadas y malvadas' 3x07 Review: más muertes y un final intrigante

Por Cristina CompanyCristina Company

Este capítulo de 'Criadas y malvadas' ha sido bastante neutro pero con un final que nos deja con diferentes sensaciones. Además, hemos echado de menos a algunos personajes como Spence o Adrian Powell, entre otros que reaparecen.

¡Vamos a ver qué es lo que ha pasado en este episodio!

(¡CUIDADO SPOILERS!)

Carmen Luna, toda una estrella

Sebastian ya le dijo a Carmen que va a dejar a la mujer en el capítulo anterior, que tiene un plan. Pero ella no acaba de confiar y nosotros tampoco.

Carmen acude a una actuación en la que un cazatalentos la lleva ante su jefa para firmar un contrato musical, la cual está encantada. Ésta no podía ser otra que la mujer de Sebastian. Resulta que desde el principio era el plan: dejar de depender de su mujer para empezar a depender de su amante. Algo a lo que Carmen se niega rotundamente.

Cuando va a rechazar el contrato, la mujer de Sebastian la manipula con un discurso sobre qué es una estrella. Finalmente lo acepta, está dispuesta a convertirse en toda una estrella.

Marisol y los rumores sobre su nueva empresa

La aparición de Jesse en público ha causado sensación, hasta tal punto que sus queridas vecinas no saben si la empresa de Marisol es realmente de criadas, o ella es una madame. Lo que está claro es que la situación sobrepasa a Marisol, y es que trabajo y placer nunca han sido una buena combinación.

Muy descontenta se queda la vecina de Marisol buscando sexo de pago, mientras que Marisol no para de pensar si Jesse solamente la quiere por intereses económicos. Por tanto, decide despedirlo a ver qué pasa. Para sorpresa de todos, parece que la relación continúa perfectamente, pero tendrá que buscarse una nueva empleada doméstica... ¿o Jesse lo hará gratis?

Genevieve está de vuelta

Reina no ha cambiado de un capítulo a otro y Zoila empieza a hartarse. Hasta tal punto que decide interrumpir las vacaciones de Genevieve para que vuelva a echar a la hermana de su criada. Reina no se da por vencida y acaba manipulando a Genevieve para que la contrate como personal shopper. Pero si en algo se parecen las dos hermanas es en su poder de manipulación. Al final, Zoila ha conseguido lo que quería: estar en paz, descansando y sin hermanas de por medio.

Compra de bebés, sobornos y conflictos finales

Evelyn está como loca por tener un hijo, hasta tal punto que intenta comprarle el bebé a Zoila. Sin éxito alguno, decide sobornar a la agente de adopciones para intentar conseguir un niño. Y es que, con dinero, nuestras protagonistas van a cualquier sitio.

Mientras tanto, Rosie empieza a averiguar más cosas sobre Katie. Resulta que es de México y que se lleva muy bien con su nueva criada. Por tanto, decide hacerle un regalo: el collar que Blanca perdió el día que la secuestraron. Rosie empieza a preocuparse y Blanca reaparece en la serie: atada de pies y manos en un sótano con un desconocido que ha creado un altar a Louie Becker. Cuando Blanca intenta escapar, el secuestrador la atrapa de nuevo.

La escena final nos deja bastante intrigados: Evelyn ha encontrado una casa perfecta en la que el precio es aún mejor. Se trata de la casa donde estaba Blanca secuestrada y que aparece ahorcada con un mensaje final: “Forgive me” (Perdóname).

Este final nos intriga y queremos saber qué va a pasar a partir de ahora. Sin embargo, seguimos con las mismas de la serie: muertes de personajes con los que no se llega a empatizar. Veremos si en el próximo capítulo encontramos tramas mucho más interesantes.

Aquí tenéis un adelanto del próximo episodio: