'Bajo sospecha’ 1x03 Review: la mujer de las mariposas quiere matarme
Por David MarañónDavid Marañón
Son muchas las series que tras su tercer capítulo comienzan a decaer o flojear, ya sea porque sus personajes pierden una personalidad bien definida en los dos primeros capítulos, porque la trama empieza a no interesar o porque se aleja de la premisa inicial, o simplemente porque aburren. Sin embargo, ‘Bajo Sospecha’ no solamente no ha mostrado signos de debilitamiento, sino que además se ha crecido capítulo a capítulo para llegar a niveles bastante decentes – creo que esta serie podría exportarse perfectamente a EEUU, por ejemplo – que difícilmente vemos en la televisión española. Así que vamos a ver qué ocurrió, cómo y lo que nos espera.
(¡¡Cuidado, Spoilers!!)
Bosco, en el punto de mira de la policía y la familia
çEl capítulo comienza en el mismo momento que acababa el anterior. Víctor descubre el altar que Bosco tenía preparado en su casa con cosas de Alicia, y va en busca del Comisario para contárselo, aunque éste le espera con otra noticia: Germán no es padre de Roberto, y por tanto, no es abuelo de Alicia. Cuando el Comisario se entera de lo de Bosco, decide emitir una orden de busca y captura para el tío de Alicia. Mientras, vemos a Laura en el colegio hablar con la madre de Silvia, la profesora fallecida, y le cuenta que no es la primera vez que intentaba suicidarse. La familia Vegas al completo se reúne en casa de Carmen y Roberto esperando a Vidal, que llega y les cuenta que Bosco está siendo buscado por la policía. Los hombres de la familia deciden ir a buscarle, y Víctor y Laura que lo escuchan van también en su búsqueda ya que temen por su vida. Consiguen encontrarle antes que la familia, pero finalmente les encuentran a los tres. Obligan a Bosco a meterse en el coche de Víctor y a Víctor a conducir hacia el bosque. Cuando llegan allí, German le dice a Víctor que se quede en el coche, y los miembros de la familia Vegas le pegan una paliza a Bosco, paliza que frena Víctor porque no aguanta los gritos.
En el hospital, Alicia entra en parada cardiorrespiratoria. Carmen avisa a Roberto, que corriendo llega justo a tiempo para acompañar a su mujer en el fallecimiento de su hija, que pierde la vida pocos segundos después de llegar su padre. Carmen se queda destrozada – bravísima Alicia Borrachero, de las mejores intérpretes que tenemos en este país -, y cantando una nana, se despide de su hija. Laura, por su parte, presenta la renuncia al Comisario, que finalmente le hace cambiar de idea. En el funeral de Alicia vemos a toda la familia, menos a Bosco. Víctor decide ir a buscarle, y cuando le encuentra, es ahorcado en medio del bosque. Cerca del sitio donde lo encuentra, ve una cabaña. Al entrar, descubre que allí ha estado Alicia. Avisa a la policía, y primero aparece Vidal, que le acusa tanto de la muerte de Bosco como de conocer la cabaña, y después aparece el Comisario. La familia también llega a la escena, y es cuando Carmen ve los zapatos de su hija y una cajetilla rota de tabaco igual de rota que como las rompe su hermano Eduardo. Al rato, habla con él, y le pide explicaciones, sin embargo, no le cree.
El diario de Alicia, el bien más preciado
En el bar, todos los hombres reunidos dejan claro que ninguno ha matado a Bosco, y que tampoco le han pegado la paliza. Aparece el Comisario, y les acusa a todos de la paliza a Bosco, así como les pregunta por la cabaña. Además, descubrimos que Roberto le dio ropa de Alicia a Bosco, pero pensando que éste la utilizaría para buscarla en las batidas de perros. Víctor, reunido con el Comisario más tarde, le dice que Eduardo estuvo en la cabaña. Carmen va a ver a Leti para comentarle lo de Eduardo y la cabaña. Después, vemos cómo es el comisario en un interrogatorio quien pregunta sobre la cabaña a Leti y a Eduardo. Ambos dicen que no se separaron ni una noche, y que allí no han estado tras la desaparición de Alicia, pero el Comisario no les cree. En el bar, Víctor espía a Roberto y Begoña, y oye decir a éste que ni estando soltero tendría algo serio con ella. Laura, por su parte, encuentra a Nuria en el bosque caminando sin rumbo fijo. Le pide que suba a su coche para acercarla a casa, y cuando la deja con su madre, vemos a Begoña muy nerviosa buscar el diario en la mochila de Nuria. Sube a la habitación de su hija, pero ésta se ha encerrado, y le pide a gritos el diario. Y es entonces cuando vemos que Nuria le ha dejado el diario en el coche a Laura.
Andrés vuelve al bar tras dejar de ser el primer sospechoso por la desaparición de Alicia. Allí, todos le reciben con normalidad, menos Roberto, que prefiere no estar en la misma estancia que él. Andrés le sigue, y ambos discuten fuera, llegando Roberto a acusarle de haber hecho daño a su hija. Tras esto, Andrés va a hablar con su hija Nuria, y le pregunta por el diario, pero Nuria no le dice nada. Laura lee el diario, y descubre que a medida que pasa las hojas se va tornando más oscuro: Alicia descubrió que su padre era infiel a su madre, más tarde quién era la amante, y para terminar, tenía planeado matar a la amante. Sin embargo, la lectura la interrumpe Begoña, que va a ver a Laura preguntando por el diario, a lo que Laura finge no saber nada. Es entonces cuando Begoña ve el diario en la mesa del comedor de Laura, y corriendo decide cogerlo para entregárselo a Carmen. Cuando se lo da, Carmen descubre que al diario le faltan hojas, y es cuando vemos a Begoña quemarlas en una barbacoa.
Ya en comisaría, el Comisario le dice a Leti que han encontrado huellas dactilares de su novio en el paquete de cereales que llevaba allí una semana nada más. Leti entonces se rompe y confiesa no haber pasado todas las noches con Eduardo. Tras esto, y con todas las pruebas que tiene frente a él, Eduardo termina confesando que utilizaba la cabaña para traficar con droga. Sin embargo, la policía allí no encuentra nada. Carmen, mientras, echa de casa a Roberto, ya que según el diario pudo ser su amante la que secuestró a Alicia. Le pide que le diga quién es, pero Roberto, callado, se va. Laura ve la escena, y decide ir a mostrar su apoyo a Carmen, y ya de paso, convencerla de que entregue el diario a la policía. En casa de Begoña y Andrés aparece la policía para llevarse detenida a Begoña en el momento que Andrés descubre los moratones que ésta tiene en los brazos. En comisaría, y con las pruebas del diario de Alicia, Begoña se perfila como la primera sospechosa, confesando además haber quemado páginas del diario de Alicia. Todas, menos una, una en la que Alicia escribe que la amante de su padre ya está muerta, invalidando así el diario de Alicia como prueba.
En la propia comisaria, Carmen le pide perdón a su hermano por haber desconfiado de él. Además, Leti y Eduardo se traen algo entre manos ya que la droga la quitó Leticia antes de que la policía llegara, y para perjudicar a Eduardo. Laura y Víctor sospechan de dónde puede estar la droga, y Víctor decide ir al pueblo de noche para preguntar entre los jóvenes donde puede conseguir droga. Es entonces cuando descubre que quien lleva todo el negocio en el pueblo es Óscar, el hijo de Vidal y ex novio de Emi.
En el próximo capítulo tendremos a Inés como siguiente sospechosa y veremos cómo Carmen descubre quien es la mujer de las mariposas y cómo en un vídeo aparece el momento del secuestro de Alicia Vega. ¡Ganas de que llegue el lunes aumentando!
Más vídeos en Antena3
Sobre este blog