El ALA exige formalmente al Colegio de Abogados de Madrid que cese a Alfonso Merlos como jefe de comunicación
La Asociación Libre de Abogados y Abogadas (ALA) ha pedido que se cese toda vinculación entre Alfonso Merlos y el Ilustre Colegio de Abogados de Madrid. A través de una solicitud formal, se exige a la Junta de Gobierno que acuerde la resolución del contrato de arrendamiento de servicio y obras suscrito con Trocadero Comunicación, la empresa del periodista a través de la que seguiría siendo jefe de comunicación del gremio de decanos, a tenor de las irregularidades administrativas y la falta de transparencia que se llevan denunciando desde mayo.
Este contubernio salió a la luz poco después de que el colaborador de Ya es mediodía fuera protagonista de una de las tramas televisivas más estrambóticas de los últimos meses, el Merlos Place: el lío amoroso entre este, Marta López y la reportera Alexia Rivas, que se hizo pública en una infausta participación del primero en un programa de Youtube a cargo de Javier Negre.
El contrato con Trocadero era “ilegal y nulo”
En el documento, accesible en la web de ALA, la asociación que destapó las irregularidades en torno a la vinculación del ICAM con el Merlos, uno de los referentes de la 'Alt Right' española, establece la cronología de las anomalías burocráticas, empezando por la comprensión de que el mismo contrato con la sociedad es “ilegal y nulo”. Dejan claro que “no existió acuerdo de la Junta de Gobierno” para autorizar la contratación, puesto que lo que se acordó era “la contratación del periodista” y no de su sociedad: “Las consecuencias de lo anterior son evidentes porque si el contrato no es válido, el ICAM lleva gastando irregularmente 181.500 euros anuales desde febrero de 2018”.
Asimismo, la renovación de su contrato, fechada en febrero de 2019, fue “ilegal y contraria a las condiciones de contratación del ICAM”, al no estar al día Trocadero Comunicación de sus obligaciones societarias.
La tesorera recomendó resolver el contrato
Además, tampoco se cumple lo acordado sobre la ejecución de las prestaciones del contrato pues Merlos “no está desarrollando los cometidos contratados con el ICAM con trabajadores/as de Trocadero Comunicación SL, sino que el ICAM le evita dicha contratación poniendo a su disposición [...] a trabajadores/as del ICAM asumiendo así el Colegio, a su cargo, el pago de salarios, seguridad social e impuestos que se ahorra la sociedad de Alfonso Merlos”.
El informe de la tesorera del Colegio de Abogados concluiría, por otro lado, en graves irregularidades en la facturación: “Hay muchas probabilidades de que se declarara a Trocadero Comunicación SL como una sociedad instrumental”, desgranan en un documento donde “recomienda resolver el contrato de prestación de servicios con Trocadero Comunicación SL y realizar un contrato directamente con Alfonso Merlos, contrato que concluye que debería ser laboral dado que trabaja con los medios materiales y personales del ICAM y que se le va a pedir exclusividad”. Este informe fue recibido por el Colegio de Abogados a mediados de mayo, sin que hubiese habido movimientos o reacciones. Por el momento, se había anunciado el estudio de “acciones estatutarias, civiles e incluso penales” contra ALA por destapar el escándalo.
“Desde ALA, consideramos inaceptable que se mantenga una relación contractual ilegal, y que el ICAM asuma un coste tan elevado durante la vigencia de la misma, sobre todo si tenemos en cuenta la precaria situación en la que se ha encontrado la abogacía madrileña desde que se decretara el estado de alarma”.
