Cañita Brava vacila a Santiago Segura en el juego de las adivinanzas

Santiago Segura y Cañita Brava se reencontraron anoche en Land Rober, el exitoso programa de Roberto Vilar en TVG. Como aún no le ha pagado las 6000 pesetas que le debe de whisky, el célebre Cañita se tomó su 'venganza' particular con el actor y director, al que le une un vínculo especial desde que coincidieran por primera vez en Torrente: el brazo tonto de la ley (1998).

Y es que Santiago Segura sudó lo suyo para adivinar que Cañita era el invitado sorpresa de la noche. Tener los ojos vendados y resolver el misterio haciendo únicamente preguntas de 'sí' o 'no' ya lo complicaba de por sí, pero si además el cómico le daba a 'sí' cuando era 'no' y, por tanto, le vacilaba con cada una de sus respuestas, más aún.

Así, Cañita dijo que era actor y que era atractivo, por lo que Segura dedujo que era Mario Casas. “Tiene un aire”, bromeó Vilar, que 'regañó' en más de una ocasión a Cañita para que no despistara tanto al entrevistado. En una de esas 'regañinas', a Cañita se le escapó una palabra, lo que dio pie a que Segura, a partir de esa “voz inconfundible”, despejara la incógnita.

Acabado el juego, tanto Vilar como Segura pusieron en valor la figura de Cañita. “A mí me hace más gracia Cañita que yo mismo”, comentó Segura, que se reencontró así con unos de los personajes más entrañables que dejó la saga Torrente, la cual catapultó a un Cañita Brava que dejó un recuerdo especial que hoy perdura.