Terapia de choque de Chicote en su Pesadilla más agresiva
Pesadilla en la cocina emitió anoche su última emisión de la temporada, donde Chicote viajó hasta el restaurante 'Phoenix' de Elche.
Estamos acostumbrados a ver enfrentamientos entre los propietarios y el propio presentador, sin embargo, esta última emisión ha destacado por ser más bronca y chocante de lo habitual.
Un propietario con aspiraciones frustradas
Cristian es el dueño del restaurante Phoenix, en Elche, un italiano con grandes aspiraciones que no llegan a cumplirse. En un inicio el propietario tenía como objetivo ofrecer platos refinados, pero nada más lejos de la realidad, ahora solo ofrece bocadillos y hamburguesas de mala calidad.
“Yo creo que en la carta deberías de avisar de que las hamburguesas son de cerdo” le dice Chicote a Cristian, mientras este se concentraba en hacer la carne a la plancha. “Si no avisas la mayoría de la gente se piensa que son de ternera”, proseguía el presentador.
Para la perplejidad de Alberto Chicote, el dueño se dio la vuelta para mirar el envase y cerciorarse de qué animal provenía la carne que estaba preparando. “¿No sabes lo que compras?” le preguntaba sorprendido Chicote. “Yo compro hamburguesas” respondía Cristian.
“Yo soy bueno fuera, yo soy un crack”
Retrasos a la hora de atender, equipo inexperto, malas contestaciones, etc. A lo que se suma un propietario que da patadas cuando se siente presionado. La complicada personalidad de Cristian sorprende a Chicote cuando se marcha de la cocina dejando solo a su camarero en ella.
“¿Dónde vas?”, le pregunta Chicote al propietario tras ir en su busca. “A quitarme adrenalina”, le espetó el italiano. “Yo soy bueno afuera. Yo soy un crack” decía desquiciado Cristian.
Terapia antiestrés
Chicote decide tomar cartas en el asunto para intentar acabar con la tensión existente entre el propietario y el camarero, Yerdin. El presentador apuesta por una actividad antiestrés con la que pretende relajar la relación entre ambos, algo nuevo en Pesadilla en la cocina.
“Os he traído aquí porque creo que hay demasiada rabia y poca liberación”, les explicaba. Chicote les propone romper cacharros viejos mientras se dicen lo que les molesta el uno del otro.
El primero en comenzar con la terapia es Cristian: “De Yerdin me molesta que siempre tiene una contestación, siempre tiene la razón”. A lo que el joven camarero respondía: “Lo que más me enerva de ti es que armes escándalo delante de los clientes”.
“La idea es solventar los problemas que hay entre los miembros de una empresa donde no se ha escuchado esto es lo que me molesta de ti” explicaba Chicote al finalizar la prueba. “Necesitamos un cambio de actitud”, sentenció.
“Es tal y como lo ves”
Alberto Chicote visitó el plató de Liarla Pardo el pasado domingo, donde hizo balance de la sexta temporada. El chef dejó claro que lo que ocurre detrás de las cámaras “es tal y como lo ves”.
Además, la presentadora Cristina Pardo y Chicote aprovecharon para hacer un breve repaso de los momentos más broncos de Pesadilla en la cocina durante las últimas entregas.