El pasado domingo Saray Montoya abandonaba Supervivientes 2018 porque tenía miedo de su reacción ante la mala convivencia con sus compañeros.
Horas después se arrepentía de su decisión y pedía regresar, antes de romper su aislamiento por completo. El reality le daba la oportunidad y la llevó de vuelta a la isla.
Saray: “¡No me echa ni Dios de aquí!”
Saray regresaba con fuerza, “¡No me echa ni Dios de aquí!”, y aseguraba que quería izar la bandera blanca de la paz y proponiéndoles empezar de cero.
Mientras se abrazaba con Raquel Mosquera, su mayor apoyo, otros compañeros, como María Jesús Ruíz, Romina y Joao, que se habían sentido aliviados con su marcha, no escondieron su decepción: “La felicidad dura poco”, decía la Miss.
Para hacer borrón y cuenta nueva lo primero que tiene que hacer es pedir perdón“, repetía María Jesús Ruiz.
Mientras que Mayte Zaldívar, desde su destierro, veía las idas y venidas de Saray y aseguraba que si se acercaba a ella: “Lo mismo me da por vomitar”.