Cuatro adquiere la polémica y exitosa serie de la BBC “Roma”
Por su interés reproducimos el siguiente artículo de Patricia Tubella (Londres) que publica hoy el diario La Vanguardia: Es una de las series más ambiciosas y caras en la historia de la BBC; también una de las más violentas y sexualmente explícitas. El estreno de Roma,un drama épico que retrata la muerte de la república y el nacimiento del imperio romano, ha conseguido arrastrar una audiencia millonaria hacia el canal público de la televisión británica, a la par que generaba legiones de quejas por el alto voltaje erótico de sus escenas y su horario de emisión. Los derechos para la emisión en España los ha adquirido Cuatro.
Treinta años después del fenómeno que supuso Yo, Claudio,adaptación de la novela de Robert Graves, la BBC ha echado la casa por la ventana con Roma,producida en colaboración con la cadena de cable americana HBO y que ha costado casi 95 millones de euros. Éxito y polémica han ido de la mano de una serie cuyo primer capítulo - emitido el pasado 2 de noviembre- congregó a 6,6 millones de televidentes (27,3% de share)y lo convirtió en el programa más visto de su franja horaria, de 9 a 10.30 de la noche. Decenas de protestas fueron presentadas ante la corporación pública ante lo que fue, sin duda, un plato fuerte no apto para todos los paladares: en los diez primeros minutos de emisión el espectador asistía a una gráfica escena de sexo, a la que seguían otras tres, incluyendo una violación. Desnudos frontales, una crucifixión, decapitaciones y horribles batallas pueblan una trama vista a través de los ojos de dos legionarios y que se desarrolla entre los años 52 y 44 a. C.
La BBC se ha defendido de las quejas alegando que la emisión viene precedida de varias advertencias sobre su escabroso contenido, que estima necesario en aras de la verosimilitud. “Así es como vivía la gente, y no se puede entender ese periodo de la historia sin mostrar con fidelidad esa sociedad precristiana y pagana”, ha declarado el escritor y cocreador del programa, Bruno Heller. Pero varios críticos televisivos se han mostrado implacables por lo que consideran falta de rigor y por las licencias que la serie se toma con algunos personajes, como Julio César. Sí admiten que Roma rezuma autenticidad.
El peor aviso para la BBC, no obstante, ha llegado con la reciente emisión del segundo capítulo de Roma,que registró una pérdida de casi 2 millones de telespectadores (20% de share)y abrió la incógnita de si tanta orgía de sangre y sexo podrá retener la atención del espectador a lo largo de once episodios. Rodada en los legendarios estudios Cinecittá de la capital italiana durante catorce meses, la serie puede resultar demasiado indigesta para los romanos de hoy en día, según estima la cadena RAI que ha decidido emitir una versión suavizada de Roma el próximo año.