Blanca Portillo, “Visitadora de cárceles” en la nueva miniserie histórica de TVE
Blanca Portillo tiene previsto pasar los próximos meses 'encerrada' en la televisión. La intérprete, actualmente en pantallas con La chispa de la vida, dará vida a la legalista, escritora y feminista gallega Concepción Arenal en una película para televisión que dirige la actriz y realizadora Laura Mañá (Clara Campoamor), según informa una de las compañías productoras, Zenit TV, en una nota informativa.
La visitadora de cárceles será el título de esta nueva tv-movie que podrá verse en Televisión Española. No será la única vez que veamos a Portillo en la pequeña pantalla: hay que recordar que la actriz también participará, de forma episódica, en Frágiles, la nueva serie de Mediaset protagonizada por Santi Millán y Ruth Núñez, entre otros, como ya informó Vertele.
La visitadora de cárceles recoge la etapa de Concepción Arenal como visitadora de cárceles de mujeres y rescata a esta figura fundamental en la historia del siglo XIX.
La historia real que sirvió para mejorar las condiciones de vida en las prisiones españolas
En el siglo XIX, en un contexto en que las ejecuciones son todavía motivo de escarnio público y los presos carecen de todo derecho, Concepción Arenal es nombrada visitadora de cárceles de mujeres. Es en la prisión de la Coruña donde Arenal empieza su lucha para mejorar las condiciones de vida de los presos y poner en marcha la reforma de las instituciones penitenciarias.
El rodaje comienza en febrero, con participación de TVG, TV3 Y RTVE
Será el próximo 1 de febrero comenzará el rodaje de esta película para televisión. Ambientada a mediados del siglo XIX, recrea la época en la que la abogada y escritora Concepción Arenal trabajó como visitadora de cárceles en la prisión de mujeres de La Coruña, una experiencia vital que luego daría fruto a algunas de sus obras clave, que a su vez servirían de base para la reforma del sistema penitenciario en España.
La visitadora de cárceles es una producción de Zenit Televisión y Distinto Films con la producción ejecutiva de Miriam Porté y Zaza Ceballos. La película cuenta con la coproducción de Televisión de Galicia, Televisió de Catalunya y Televisión Española. También ha recibido el apoyo del ICAA, de la Consellería de Cultura y Secretaría de Igualdade de la Xunta de Galicia, del ICIC y del Instituto de la Mujer.
Laura Maná (“Clara Campoamor”) dirige en localizaciones gallegas y catalanas
La dirección corre a cargo de Laura Mañá (Sexo por compasión, La vida empieza hoy y Clara Campoamor, la mujer olvidada). El guión está escrito por Rafa Russo y Laura Mañá. El rodaje, que se llevará a cabo en localizaciones catalanas y gallegas como el castillo de Montjuïc en Barcelona, el de San Felipe en Ferrol, o el monasterio de Santa Catalina en Ares, tendrá una duración de cinco semanas.
La ganadora del Goya Mabel Rivera (“Mar adentro”) y Pere Arquillué acompañan a Portillo
Blanca Portillo, actriz polifacética y de larga trayectoria, conocida por sus excelentes trabajos en cine y televisión, interpreta a la protagonista de la historia, Concepción Arenal. La acompañan la actriz Mabel Rivera (La Bella Otero y ganadora de un Goya a la Mejor Actriz de Reparto por Mar Adentro) en el papel de Juana de Vega y el actor Pere Arquillué (La Riera, Mar de Fons, Cazadores de hombres), que hará las veces de Garrido, el alcaide de la prisión de mujeres.
Junto a ellos participan Anna Casas (Pelotas), Diana Gómez (Barcelona, ciutat neutral), Oscar Rabadán (Bandolera, Clara Campoamor), Xosé Barato (El secreto de Puente Viejo), Luísa Merelas (Piratas, Matalobos), Isabel Naveira (Matalobos), Candela Fernández (Los cronocrímenes), Fermí Reixach (La Riera) y Juanma Lara (Carmina) entre un nutrido grupo de actores.
“Odia el delito y compadece al delincuente”
Esta cita de Concepción Arenal permaneció grabada durante años de forma obligatoria en las prisiones españolas. La obra social y ensayística de esta abogada, activista y precursora del feminismo, marcó un antes y un después en el sistema penitenciario de nuestro país y obtuvo un enorme eco en la Europa del XIX. Su lucha a favor de los derechos humanos logró cambiar la perspectiva de la sociedad sobre los más desfavorecidos y mejorar sus duras condiciones de vida.