Por su interés, reproducimos a continuación un artículo: La llegada de nuevas cadenas de televisión -Cuatro, La Sexta y las autonómicas de Asturias, Baleares y Extremadura-, el potencial de los nuevos operadores por cable y el auge de la televisión por internet y por telefonía móvil están modificando las preferencias en el consumo de televisión. Los registros de audiencia de las distintas opciones a las que hoy tiene acceso la sociedad van experimentando lenta, pero inexorablemente, cambios. El gráfico es suficientemente ilustrativo de la historia de este proceso de trasvase. En una década las televisiones públicas (estatales y autonómicas) y las privadas (Antena 3 y Telecinco) han perdido 10, 5 puntos de audiencia. En 1993 acaparaban el 97,1% de la audiencia, en 2005 su cuota era del 86,6%. La audiencia de Cuatro y La Sexta también procede, en su gran mayoría, de las cadenas más veteranas. Y esto se constata en el periodo de tiempo entre octubre de 2005 y octubre de 2006. Hace un año, las cadenas públicas -TVE-1, La 2 y La Forta (autonómicas) -congregaban al 42, 2% de los telespectadores; ahora tienen el 37, 5%: han perdido un 10%. Las privadas tradicionales -Telecinco y Antena 3- tenían el 44,6% de la audiencia, hoy son seguidas por el 39,9% del público: han perdido un 11%. Cuatro y La Sexta ya acaparan el 9,2%: 6.7% para la cadena de Sogecable y 2,5% para la presidida por Emilio Aragón, cuando ésta aún no ha concluido su proceso de antenización. En el apartado de Otras -TDT, cable, temáticas, locales...- su crecimiento en un año ha sido de un 15%: han pasado del 11,4% de octubre de hace un año al 13,1% actual. Y ésta es la tendencia que según los expertos continuará hasta la llegada del apagón analógico y la entrada en la era digital. Pero esa es otra historia. La historia del más inmediato futuro es la fragmentación de audiencias, y esta se irá produciendo por causas varias, pero quizá la más determinante sea que cada operador ofrezca contenidos dirigidos a un perfil de audiencia muy concreto. Y esta estrategia de programación se constata ya en la solidez de los canales temáticos para adultos -Odisea, AXN, Historia, Hollywood, Paramount, Cosmopoltan..., con más de un millón de visitas diarias- y en el crecimiento de los dedicados al público infantil -Disney, Cartoon, Jetrix...- dado que este segmento poblacional no interesa -excepto en La 2, K33 y Canal Sur 2- a las televisiones generalistas de cobertura nacional. Y algo parecido ocurre con los jóvenes. Según el informe Medios de Comunicación. El año de la Televisión de la Fundación Telefónica, la exposición al medio televisivo, entre los jóvenes de 13 a 24 años, ha decrecido de forma acusada en los últimos 10 años, con una caída del 13,3%. Han pasado de un consumo de 166 minutos a 144. La televisión no les proporciona contenidos específicos para ellos y han buscado otros espacios y medios para ocupar su tiempo de ocio -también de comunicación y formación- como los videojuegos e internet. En 1993 el consumo de televisión era de 204 minutos por persona y día; 12 años después es de 217, pero este aumento no ha ido a la oferta de la televisión convencional, sino a Otras.