Cárceles de mujeres, falsos predicadores y mafias del sexo, lo nuevo de “Documentos TV”
“Documentos TV”, el veterano espacio de La 2 dirigido y presentado por Pedro Erquicia, ofrece desde el próximo martes diez nuevos documentales para intentar acercarse a los temas de nuestro tiempo desde otros ángulos, informa la cadena en una nota.
La América profunda, las mafias del sexo, las cárceles de mujeres, los especuladores en las guerras y el mundo actual -según los grandes buscadores de Internet- son algunos temas que se abordarán en este temporada.
La temporada vigésimo segunda del programa se ha presentado hoy en una rueda de prensa a la que han asistido el director de TVE, Javier Pons y el director y presentador de “Documentos TV”, Pedro Erquicia.
El director de TVE se ha mostrado orgulloso de presentar una temporada más de “Documentos TV”, un espacio, según Pons, “riguroso, que profundiza y ofrece otra mirada para comprender los temas de la actualidad que se descubren por primera vez en los telediarios”.
Los entresijos de los “contratistas de la seguridad privada”
Pedro Erquicia ha explicado que, de los diez nuevos documentales, ocho proceden de la Unión Europea y dos de Canadá. Entre estos trabajos ha destacado, como periodista, el de “Mercenarios”, en el que se descubren los entresijos de los “contratistas de la seguridad privada”.
El director de “Documentos TV” ha señalado que la temporada anterior se emitieron cuarenta y siete documentales, de los cuales treinta y dos eran de producción propia y quince de producción ajena, y alcanzaron una audiencia media de más de medio millón de espectadores.
También ha anunciado que están preparando trece nuevos documentales de producción propia y nacional, que verán la luz en la Primavera de 2008.
Predicadores del evangelio que recorren EE.UU, en el estreno
“El circo de Dios” es el primero de los diez documentales nuevos que va a emitir el programa. En este trabajo se podrán ver personajes que dicen tener dones psíquicos y espirituales con los que curar a los enfermos y salvar almas. El público al que se dirigen suele ser de edades superiores a los cuarenta años, de capas sociales bajas, especialmente de zonas rurales.
Hay personas que incluso viajan más de mil kilómetros para acudir a una ceremonia de un conocido predicador. No tienen dinero, duermen en el coche y su única ilusión es la de poder estar presente en el acto para experimentar el trance espiritual y sentirse curadas de sus dolencias de todo tipo.
Todd Bentley es un caso paradigmático. Un joven de 28 años, amante de la velocidad y de la estética motera, dice a todo el que se le acerca que quiere “tener” un millón de almas, que antes de cumplir 29 años quiere curar a un millón de almas y afirma con todo tipo de expresiones que él puede curar el cáncer o cualquier otra enfermedad porque está tocado por el Espíritu Santo.
