Así comenzó anoche Pekín Express: la madre y la hija, primeras expulsadas
La aventura en África ya ha dado comienzo en Cuatro. Este pasado domingo comenzó la cuarta edición de Pekín Express, con Jesús Vázquez sustituyendo a Raquel Sánchez Silva a los mandos de la expedición, y con una primera pareja de concursantes marcada por la polémica.
Si bien el primer programa no ha destacado por contener momentos de tensión destacados, no ha estado exento de enfrentamientos entre las parejas. En concreto, la de Paula, la jugadora de póker y su madre, Luisa, se han granjeado las enemistades con sus compañeros cuando se negaron a que varios compañeros se montaran en uno de los camiones que consiguieron para llegar a Kabernet.
Otras tres parejas subieron al camión con ellas, y, en un momento dado en el que el conductor paró a repostar el camión, Paula y Luisa se quedaron en el vehículo mientras el resto de parejas bajaron. En cuanto el conductor llenó el depósito de gasolina, el camión arrancó rápidamente dejando a las dos parejas en tierra. “Esto es una competición, aquí maricón el último”, aseguraba Paula.
La venganza por parte de los demás llegó en la recta final de la carrera. Madre e hija se vieron sin transporte en la última parte del recorrido; mientras tanto, las parejas a las que había negado el transporte las dejaron atrás en un vehículo. Finalmente, Paula y Luisa llegaron las últimas a su destino.
Los desconocidos consiguen el primer amuleto
Jota y Freire, la pareja de desconocidos, se alzaron como los primeros ganadores de Pekín Express, al recorrer en menos tiempo los 102 kilómetros de la primera etapa. Con ello, se hicieron con el primero de los amuletos que se pondrán en juego a lo largo de las etapas del concurso, valorado en 5.000 euros.
Notable regreso en audiencias
El estreno de este nuevo Pekín Express contó con el respaldo de la audiencia: 10.3% y 1.459.000 espectadores, lo que mejora en tres puntos los datos obtenidos en la anterior edición (que anotó un 7.6% de share).