El retraso del dividendo digital podría dejar sin Mundial a millones de hogares
El retraso del Gobierno en aprobar el dividendo digital podría terminar con muchos hogares sin la posibilidad de ver la televisión. Si sumamos el lógico malestar que ello produciría a que el Mundial de Brasil se inicia el 12 de junio, la situación podría convertirse en un clamor contra el Ejecutivo, como explica El Confidencial.
El plan supone una mudanza total de canales en el espectro radioeléctrico y obliga a un período en que las emisiones se simultaneen en dos franjas de la banda –el denominado simulcast– para evitar que un contingente de usuarios se vaya a negro. En principio, el proceso debía llevarse a cabo en un año. Quedan nueve meses para el 1 de enero de 2015, fecha fijada para el trasvase, y no hay calendario.
“Si no se simultanean las emisiones o no se hace bien, habrá hogares que no verán la TV”
“Todo puede hacerse, pero si alguien me dice hace unos meses que íbamos a estar así entrados en el mes de abril, no me lo habría creído”, asegura al mismo medio un alto ejecutivo del sector, bajo condición del anonimato.
“Las empresas llevan meses paradas y ahora habrá que hacerlo todo a la carrera. Sin contar con que no está claro cómo va a hacerse el simulcast. Todo eso debe fijarse en el plan del dividendo digital. Si no se simultanean las emisiones o no se hace bien, habrá hogares que no verán la televisión. En muchos casos no bastará con resintonizar el aparato. Y hay Mundial de fútbol… y de baloncesto [que además se celebra en nuestro país]. El Gobierno se puede meter en un lío fenomenal”.
El ministro Soria incluso adelantó el dividendo digital al 2014
El propio Ministerio de Industria daba las cifras, cuando parecía tenerlo todo control, allá por el año 2012. Soria incluso se atrevió a adelantar la entrada en vigor del dividendo al 1 de enero de 2014 y lanzó una ambiciosa campaña de comunicación valorada en 2,6 millones para informar a los usuarios sobre los cambios. Pero los plazos no se han cumplido.
Entonces, el secretario de Estado de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Víctor Calvo-Sotelo, cifraba en 1,2 millones el número de inmuebles que tendrían que adaptar sus instalaciones, e incluso añadió que serían los propios consumidores quienes tendrían que hacer frente al coste que supusiera esa reantenización. Estimó el gasto en 20 euros por familia.
Podrían producirse interferencias por la coexistencia de TV y móviles
Eso si no se producen imprevistos, que hay ya poco tiempo para corregir. Un informe del regulador británico para las comunicaciones (Ofcom) advertía de los riesgos del desplazamiento de las cadenas en el espectro radioeléctrico, al punto que podían producirse interferencias en unos 900.000 hogares del Reino Unido si no se tomaban medidas.
La situación se agravaría en España, que ha confiado toda la recepción de la señal televisiva a la vía terrestre. “El hecho de que coexistan servicios diferentes –televisión y móviles– en bandas de frecuencia adyacentes genera interferencias”, explicaban fuentes del sector.
Ofcom calculaba que la instalación de filtros en las antenas o una eventual migración de plataforma al satélite o al cable supondrían un coste para el Reino Unido de 180 millones de libras (en torno a 230 millones de euros), el equivalente a 255 euros por afectado.
Telecos, televisiones y Abertis siguen señalándose unos a otros
El 1 de enero de 2015 las telecos deben tener a su disposición para servicios de banda ancha (4G) el espacio en el espectro radioeléctrico (la denominada banda de 800 megahertzios) que hoy ocupan las televisiones, que pasarán por debajo de la de 700. En principio, con los ocho múltiplex que actualmente ocupan.
De hecho, Telefónica, Vodafone o France Telecom ya han pagado más de 1.600 millones por esa mudanza. Y con el deadline a la vuelta de la esquina, ni siquiera está resuelto quién pagará el simulcast. De hecho, todos señalan al prójimo. Las televisiones apuntan a Abertis. Por su parte, la firma catalana mira para otro lado. Y en este punto, todo parece a la expectativa de la súplica del Ejecutivo a Bruselas.
Sentencia del Supremo, ante la “inacción” del Gobierno
Recordemos que la situación se complico en noviembre de 2012, cuando el Tribunal Supremo publicaba una sentencia que ordenaba el apagón de nueve canales concedidos sin concurso. El Gobierno vinculó el traslado de los múltiplex para generar el dividendo digital a que se sustanciaran los recursos sobre la aplicación del fallo.
No falta quien piensa que aprovechó el tirón para atar en corto a las televisiones –en pleno affaire Bárcenas– con esa espada de Damocles. Lo cierto es que el impasse terminó convirtiéndose en inacción, y desde ahí en lacerante pasividad.
Por el camino, hasta el Alto Tribunal tuvo que reconvenir al Ejecutivo por meterse a hacer de juez y poner todas las trabas posibles para no ejecutar la resolución. Hasta hace apenas unos días.
Uteca presiona, pero el plan del dividendo digital sigue sin detallarse
Y es que el 27 de marzo, tras requerimiento del Supremo, Industria ordenaba el fundido a negro antes del 6 de mayo de 9 canales de la TDT. La patronal de las televisiones (Uteca) lanzaba el jueves una carta abierta al ministro Soria en la que se aseguraba que las cadenas están decididas a “emprender todas las acciones legales necesarias para la defensa de nuestros derechos y los de los espectadores”.
La misiva aparecía firmada por José Manuel Lara y Alejandro Echevarría, cabezas visibles de Antena 3 y Telecinco. Eso sí, la disposición debería al menos despejar el camino para que el Ministerio publique la hoja de ruta para el dividendo digital que el sector espera desde hace más de un año.
Por el momento, y pese a la fuerza conjunta de las privadas, este plan tampoco se ha detallado en el Consejo de Ministros de este viernes.