RTL-2 estrenó el pasado 1 de marzo la sexta entrega de “Gran Hermano”, que este año tiene como novedad su duración indefinida y la realización en una ciudad artificial de 25.000 metros cuadrados creada expresamente para el programa en Ossendorf, una localidad cercana a Colonia. La cadena alemana, que suele tener una cuota del 7% en el segmento de edad de 14 a 49 años (la más apreciada por los anunciantes), ha triplicado su audiencia con este “GH eterno” al llegar al 19,7% de cuota, según informa El Periódico de Cataluña. Toda la ciudad está aislado con un sistema de seguridad según las más estrictas normas de la Alianza del Atlántico Norte (OTAN) y unos 300 guardias y empleados cuidarán para que nadie intente colarse. La única crítica recibida por el concurso ha sido de la Asociación Federal Protectora de Animales: califica la aldea de “una cárcel para animales disimulada con paja”, pues alberga a dos cerdos, dos vacas, dos cabras y varias gallinas. 15 concursantes En total, son quince personas las que han aceptado “pasar el resto de su vida” en la “ciudad” diseñada por “Gran Hermano”, vigilada por 100 cámaras y 60 micrófonos, aisladas del mundo exterior como en la película “El show de Truman”. La ciudad dispone de jardines, bosques, una plaza, una piscina y hasta una iglesia. Tres tipos de viviendas Hay tres tipos diferentes de viviendas: la “pobre”, ubicada cerca de los establos y equipada sólo con electrodomésticos y artículos de primera necesidad; una casa “normal”; y una “rica”, en la que los habitantes tienen derecho a tres comidas diarias y a la recepción de mensajes diarios. Todos los habitantes están obligados a trabajar –como mecánico de coches, en una firma de ropa o en la granja del programa- y llevar a cabo tareas relacionadas con su estatus social. “Se formará un microcosmos social con su lucha de clases, envidia y oportunidades reales de escalar o fracasar en la escala social”, declaraba un portavoz de RTL2, la cadena que emite el programa. Un millón de dólares al año Los concursantes, que competirán por un premio de un millón de euros al año –además contar con un sueldo mensual fijo de 1.500 euros- también deberán enfrentarse en diferentes retos personales, como aprender un nuevo idioma o estudiar una carrera. Aunque no se sabe si llegarán a poner en práctica los conocimientos que adquieran en el programa, puesto que RTL2 pretende tenerlos “encerrados” de por vida, “Dios y la audiencia mediante”, declaró una ejecutiva de la cadena. En el “Pueblo Gran Hermano” la idea es “reproducir” todas las etapas de la vida humana a lo largo de los años serán prácticamente ilimitadas. Bodas, divorcios, infidelidades, nacimientos y muertes, todo podrá ser seguido en una emisión en directo de 24 horas. Los responsables del programa se encargarán de hacer todo lo posible para que la trama de sus vidas no termine y, sobre todo, para que no sea aburrida. Visitas de famosos Algunos concursantes famosos aparecerán ocasionalmente, pero el grupo principal de concursantes permanecerá en la ciudad “durante décadas”, asegura Laux. Gran Hermano, un parque temático La ciudad ficticia de “Gran Hermano”, construida sobre el plano de un parque temático, permitirá que los fans del programa visiten la comunidad para ver a sus habitantes como si se tratara de un zoológico. Suponemos que los concursantes pueden abandonar el programa cuando lo deseen y que la cadena se reserva el derecho de interrumpir la emisión del programa si flojea la audiencia. La quinta edición terminó el 28 de febrero Al igual que en España, el “Gran Hermano” alemán ha mantenido su popularidad en la televisión germana desde su lanzamiento en 2000. El actual “Gran Hermano”, que terminó el 28 de febrero, se exhibió durante hace un año. De ahí la idea de dar un segundo giro de tuerca y ampliar el plazo de 365 días hasta el infinito, como en la película “The Truman Show”, en la que el protagonista (Jim Carrey) era filmado toda su vida en un pueblo ficticio. ¿Por qué no crear un “Gran Hermano” que dure décadas, vidas, generaciones?, pensaron los productores del “Big Brother” alemán. RTL2 ha enganchado el final de la quinta edición de “Gran Hermano” directamente con esta sexta entrega. “Todos saben lo que les espera” Algunos ya especulan sobre los efectos psicológicos de un encierro de estas características ¿En qué tipo de persona podrá convertirse alguien después de pasar décadas en estas circunstancias? ¿Se puede renunciar voluntariamente a la propia libertad de por vida, como lo harán los 16 participantes de la serie? “Todos los candidatos saben lo que les espera”, explicó a Die Welt el productor Rainer Laux, quien rechazó las advertencias de los psicólogos sobre los peligros de vivir en un mundo de mentira por años y las dificultades al volver a la vida real.