El polémico vídeo 'porno' de Miley Cyrus en el Festival de Nueva York
La última polémica de Miley Cyrus, sorprendentemente, no ha sido culpa de Miley Cyrus. Acostumbrados a sus modelitos imposibles (o directamente no modelitos), a su lengua inquieta, o a su pasión por fumar cigarritos de la risa subida a un escenario, la cantante se ha visto esta vez inmersa en un embrollo que no esperaba.
Porque aunque es cierto que Cyrus accedió a grabar un vídeo con estética sadomasoquista titulado “Tongue Tied” (algo así como “Lengua atada”), circunstancia que ya tampoco resulta tan llamativa, la cantante no había dado su visto bueno para que este clip se presentara en el Festival de Cine Porno de Nueva York.
Así lo afirman sus representantes, que van más allá expresando incluso que fueron engañados sobre la naturaleza del evento, y que Cyrus no permitió expresamente que el vídeo se presentase en este Festival, como aseguró el director del mismo, como recoge El Mundo.
“Ella no promovió esta presentación y no está participando de ningún modo”
“Miley estaba orgullosa de hacer un corto con el popular director Quentin Jones. Ella no promovió esta presentación al festival y no está participando de ningún modo”, explicaron sus representantes.
Simon Leahy, responsable del Festival de Cine Porno de Nueva York, dijo previamente que Cyrus había presentado su cinta tras oír hablar del evento a través de amigos comunes, y mostró pruebas de un intercambio de e-mails con la productora Cadence permitiendo el uso del videoclip.
Sus representantes explican que las explicaciones del evento fueron engañosas
Sin embargo, sus representantes aseguran que los e-mails enviados por el festival presentaban al certamen porno de forma engañosa, retratándolo como una “proyección de cortos en el espacio para artistas Secret project Robot”.
Simon ha cumplido con la petición de retirar el film del programa, pero insiste en que hubiera encajado a la perfección con su festival, que a su juicio no es un evento sórdido.
“Básicamente, no hicieron sus deberes con diligencia. Pedimos que se mostrase en el festival. Claramente, la historia se hizo viral y enloqueció todo el mundo. No queríamos causar ningún daño a Miley o su imagen. Es como si estuviésemos en un festival de arte. Incluso aunque usemos la palabra porno, no somos una especie de festival de porno barato de Los Ángeles”.