“Si Cuatro hubiera nacido antes, habría luchado por emitir GH”
Cuando se cumplen diez ediciones de la puesta en marcha del primer gran reality show en España, “Gran Hermano”, tres directivos de las principales cadenas de televisión han valorado la importancia y el tratamiento de este género en el panorama audiovisual nacional.
¿En qué medida dependen las parrillas de televisión de este tipo de programas?, ¿en qué momento de su desarrollo se encuentran?, ¿qué futuro tienen en nuestro país?, ¿de qué manera abordan las televisiones la intimidad de las personas que se prestan a ser grabadas?
“Los realities están en periodo de nacimiento”
Elena Sánchez, directora de Contenidos de Cuatro; Eva Cebrián, directora de Programas de TVE; y Roberto Ontiveros, subdirector de Programas de Antena 3, han dado su opinión sobre este tema en una mesa redonda organizada por la VI edición del Festival URBAN-TV que durante esta semana se ha desarrollado en la Casa Encendida de Madrid y que ha estado moderada por el naturalista y colaborador de televisión Luis Miguel Domínguez.
* Elena Sánchez, directora de Contenidos de Cuatro
“Yo soy de los que piensan que los realities están en periodo de nacimiento, aún nos queda mucho que ver”, ha dicho el subdirector de Programas de Antena 3, Roberto Ontiveros, quien también fue director de “Gran Hermano” -el famoso 'Súper'- durante sus siete primeras ediciones.
Ontiveros ha recordado la importancia de este programa en el panorama televisivo actual por haber “modificado el lenguaje de este medio”.
“Cuando nos llegó el formato en 1999 me di cuenta de que era el primer programa que pretendía entretener sólo con la realidad. Me gustó porque pienso que hay programas que sólo tienen la obligación de entretener, que es algo muy difícil de conseguir, y éste lo lograba”, ha explicado recordando su etapa al frente de “GH”.
“Los realities han ayudado al desarrollo de internet en España”
En este mismo sentido, el directivo de Antena 3 ha explicado la novedad que, a su juicio, supuso el estreno de “GH”: “Implicaba compartir la intimidad de los concursantes, fue la primera vez que los guionistas iban por detrás de los acontecimientos, dio servicio a toda una parrilla de una cadena, fue un producto rentable y se consiguió la interactividad con el público: Nunca antes el público había sido responsable de lo que pasaba en el transcurso de un programa”, ha dicho.
Además, ha recordado que “GH” fue el primer caso de retransmisión multimedia de un programa. “Hasta entonces se veía a internet como una amenaza, pero desde entonces, se convirtieron en medios complementarios. Algún día se tendrá que estudiar cómo han ayudado los realities al desarrollo de la Red en este país”.
Sin embargo, ha reconocido que en España “cada vez hay más show y menos reality, aunque con las migajas de telerrealidad que quedan, yo me entretengo muchísimo”.
* Roberto Ontiveros (Antena 3) / Eva Cebrián (TVE)
“Si Cuatro hubiera nacido antes, lucharía por tener GH”
A este respecto, la directora de Contenidos de Cuatro, Elena Sánchez, ha reconocido la importancia de este programa en la historia de la televisión. “Observar al ser humano, que es la máquina más perfecta, nos produce fascinación, y ésa es la clave de que los realities funcionen”.
Refiriéndose al padre de todos los formatos de telerrealidad, Sánchez ha reconocido que si Cuatro hubiera nacido antes, tendría que haber luchado por quedarse con “GH”, porque “era un programa innovador” que se habría identificado con la cadena.
“Hay más telerrealidad en ‘Callejeros’ que en '¡Mira quién baila!'”
Sin embargo, la responsable del canal de Sogecable ha querido hacer una reflexión sobre el significado del término 'reality': “¿A qué nos referimos con esta palabra, a ‘GH’ o a ‘Callejeros’?, ¿cuál es más reality de los dos? Desde luego, hay más telerrealidad en ‘Callejeros’ que en otros programas como ‘¡Mira quién baila!’ –que se suele considerar equivocadamente reality- porque enseñamos de la manera más digna posible la vida de personas anónimas”, ha comentado.
Por su parte, la directora de Programas de TVE, Eva Cebrián ha querido desmarcarse de sus compañeros alertando sobre el peligro de que la “telerrealidad pueda afectar al sistema de valores colectivo”. Y ha continuado: “Lo más importante es el tratamiento que se da a estos programas, ya que va a ser lo que va a establecer la línea de la intromisión en la realidad de las personas”, ha dicho Cebrián, para quien la “telerrealidad empieza en los informativos”.
“TVE no puede emitir determinados reality shows”
Además, Eva Cebrián ha explicado el papel que juega TVE respecto a este tipo de programas: “En las televisiones públicas no se deben hacer determinados realities porque hay una línea muy fina que nos separa de la intimidad de las personas que no hay que pisar”.
* “¡Mira quién baila!” (La 1)
En este mismo sentido, Cebrián ha insistido en la importancia de “no poner en valor los sufrimientos de los demás”, y ha pedido responsabilidad en este aspecto también a las cadenas privadas.
“También pagamos a la televisión pública para que nos entretenga”
Sin embargo, Roberto Ontiveros se ha mostrado en desacuerdo con que una televisión pública deje de emitir realities: “Es como si los periódicos renunciaran a un género, como si mañana ya no publicaran entrevistas”, ha explicado el ex director de “GH”, quien considera que sobre este género “aún hay muchos prejuicios”.
“La televisión pública también tiene que entretener, tiene el deber de hacerlo y nosotros el derecho de que nos entretengan, que también pagamos para ello”, ha protestado Ontiveros, quien ha defendido la idea de que la televisión debe informar, formar y entretener “pero no tiene por qué hacerlo al mismo tiempo”.
Por su parte, Cebrián ha replicado al directivo de Antena 3: “TVE no renuncia a los realities, por eso tenemos ‘El coro de la cárcel’”, aunque ha reconocido que quizás el perfil de la cadena no sea el adecuado para emitir muchos programas de este tipo.
“Igual es que no hemos sabido hacerlos o que, además de reality, hemos querido incorporar otras cosas, como pasó en ‘Hijos de Babel’”, el reality musical con inmigrantes que la pública ofreció la pasada temporada.