Presentado el estudio que revela que los niños dedican más horas a la tele que a estudiar
Los niños de entre 4 y 12 años destinan unas 990 horas al año a la televisión, frente a las 960 horas que pasan en la escuela, según el 'Libro Blanco: la Educación en el entorno audiovisual' que ha realizado el Consell de l'Audiovisual de Catalunya (CAC) con la colaboración de más de un centenar de profesionales de la comunicación, educadores y padres y madres de familia.
El estudio, presentado hoy en la Delegación del Govern de la Generalitat de Catalunya en Madrid, revela que el consumo infantil y juvenil de televisión ronda las 19 horas semanales y sumado al uso de las video consolas y del ordenador, los niños se pasan unas 30 horas semanales delante de una pantalla.
Además, el estudio constata que los niños miran más la televisión a partir de las 22 horas, con lo que la programación está fuera del horario protegido (de las 6 a las 22 horas). Las franjas horarias de mayor consumo de los menores se concentran en el 'prime time', de 21 a 24 horas.
El CAC considera que la escuela puede y debe jugar un papel fundamental en la educación de la comunicación. Así, proponen una “educación en comunicación audiovisual” para que los niños puedan tener criterio a la hora de seleccionar los contenidos televisivos. En este sentido, recogen una vieja reivindicación de algunos expertos de introducir una asignatura en el currículo de los alumnos sobre esta materia.
El estudio también critica la poca programación de las televisiones públicas y privadas del país dedicada al público infantil. La excepción de la norma podría ser la autonómica catalana TV3 a través del programa Super 3 y el canal K3.
Las cadenas generalistas sólo destinaron el 10,3 por ciento de su programación a la público infantil durante la temporada 1999-2000, y en la temporada siguiente, sólo fue el 7,3 por ciento del total. Además, sólo el 6 por ciento de la animación televisiva española que se emite es producción propia (el 75 por ciento de la cual es catalana). En este sentido, el CAC sugiere la creación de nuevos programas infantiles y juveniles e, incluso, canales dedicados a este público, en especial en las televisiones públicas.